A los hijos se les quiere igual sean o no biológicos. Pero también es verdad que cuando una madre lo lleva dentro nueve meses y da a luz, va acumulando recuerdos de la vida del bebé ya desde su primera ecografía más la pulsera del hospital, miles de fotos de recién nacido, la pinza del cordón... Al menos yo, los guardé como un tesoro, una parte de su vida.

En el caso de los niños que no van con sus padres al nacer, su vivencia es diferente, ya que se pierden la memoria tangible de ese comienzo de su vida. Para evitarlo, la Unidad de neonatos del Servicio de Pediatría del Hospital Clínico Universitario de Valencia ha iniciado el proyecto de humanización "Mis primeros días": recopila una serie de objetos y fotografías de los primeros días del bebé para entregar en una caja a las familias de acogida o adopción.

Leer noticia completa aquí.

Fuente: Bebés y más