• Más 400.000 personas en Cataluña han recibido ayuda humanitaria y más de 1 millón han sido beneficiarias indirectas durante este año. Se han distribuido más de 3.600 toneladas de alimentos y 110.000 kits de ayuda básica a la población más afectada por las consecuencias sociales y económicas de la crisis.

• El 61,2% de hogares han reducido los ingresos estables por la pandemia y el 5% de los asalariados se han reconvertido en ERTO.

• Se han diversificado los núcleos familiares que han recibido soporte de la entidad. Cabe destacar el 15% de personas menores de 65 años que viven en situación de soledad y que, en muchos casos, no cuentan con red familiar o social.

• La falta de capacitación digital y de recursos telemáticos dificulta el acceso a derechos básicos como el Ingreso Mínimo Vital. La mitad de las personas encuestadas no dispone de ordenador en el domicilio y 3 de cada 10 no cuentan con conexión wifi o datos móviles.

Desde marzo del año pasado y hasta la fecha, el Plan Cruz Roja RESPONDE ante el coronavirus ha prestado apoyo humanitario a 415.976 personas en situación de vulnerabilidad en toda Cataluña y 1.039.940 han sido beneficiarias indirectas de esta ayuda. En total, se han distribuido 3.646 toneladas de alimentos, 110.064 kits de ayuda básica y 34.923 tarjetas de prepago entre la población más vulnerable a través de 74 centros.

En cuanto a los albergues que se han desplegado en todo el territorio, se han abierto en este período 1.414 plazas, de las que 661 continúan activas para alojar a personas vulnerables y por contactos estrechos con COVID-19.

El 48% de las personas desempleadas atendidas y encuestadas por la Cruz Roja en Cataluña a lo largo de este año han perdido el trabajo debido a la pandemia -casi 10 puntos más que en octubre de 2020-, mientras que en el 61, 2% de hogares que antes de la crisis sanitaria contaban con ingresos mensuales más o menos estables han disminuido sus recursos económicos. Un 5% de los asalariados han acabado reconvirtiéndose en expedientes de regulación temporal de empleo (ERTO). El 91% de las personas que trabajan lo hace en modalidad presencial puesto que su trabajo no permite el teletrabajo.

Éstas son algunas de las conclusiones del segundo informe del Observatorio “Impacto de la COVID-19 en colectivos vulnerables” que se ha elaborado con 1.535 personas menores de 65 años atendidas en el Plan Cruz Roja RESPONDE y encuestadas entre los meses de noviembre y enero 2021.

Según este estudio, durante los últimos meses se han diversificado los perfiles de núcleos familiares que han recibido apoyo de la entidad, lo que ha implicado un esfuerzo para ofrecer respuestas personalizadas a cada tipología. Predominan las parejas con descendencia (48%), seguidas de las familias monoparentales con madre al frente (18%). Cabe destacar especialmente el 15% de personas menores de 65 años que viven en situación de soledad y que, en muchos casos, no cuentan con red familiar o social.

De la brecha digital al acompañamiento digital

El informe también pone de relieve cómo la falta de recursos telemáticos, unida a la falta de capacitación digital y de conocimientos administrativos más específicos, dificulta la tramitación y el acceso de parte de la población a derechos básicos como el Ingreso Mínimo Vital (IMV), la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC) y otras ayudas.

En esta línea, el estudio señala que la mitad de las personas encuestadas no disponen de ordenador en el domicilio, que 3 de cada 10 no cuentan con conexión wifi o datos móviles y que el 38%, además, no saben realizar gestiones en línea.

Para paliar esta problemática, Cruz Roja ha reforzado los servicios de información, acompañamiento y seguimiento en los trámites y en las gestiones y ha habilitado espacios de soporte digital para acceder al IMV y a la RGC.

En cuanto al IMV, el 10,2% de las personas ya lo están recibiendo pero al 52% se lo han denegado o no cumplen con los requisitos para solicitarlo. Se constata un aumento en el conocimiento de esta ayuda respecto al informe anterior, aunque el 35% la desconocen.

Sensibilización, prevención e intervención en salud

Según el informe, se ha triplicado la incidencia del coronavirus entre las personas atendidas por la entidad o alguno de sus familiares, que pasa del 5% (octubre 2020) al 16,8%. Además, un 54% de los usuarios afirman que su salud emocional se ha visto afectada a raíz de la situación de confinamiento o el miedo a contraer la enfermedad.

Para hacer frente a esta situación, Cruz Roja ha llevado a cabo numerosas acciones de sensibilización y prevención en el ámbito de salud. Así, junto con la Generalitat de Catalunya, se ha impulsado una campaña de sensibilización entre los jóvenes para prevenir la COVID-19 en los espacios de ocio nocturnos que ha llegado a 86.488 personas.

Por otra parte, actualmente sigue en marcha el proyecto de Promotores Comunitarios de Salud con el objetivo de concienciar y dar pautas preventivas sobre el coronavirus, y también se está apoyando el sistema de salud pública en los cribados a la población general, en especial en centros escolares y de mayores (168.320 pruebas realizadas).

Cabe señalar que se han realizado 187.516 llamadas de seguimiento, prevención y promoción de la salud entre los colectivos más vulnerables además de facilitarse 8.000 entregas de medicación a personas con enfermedades crónicas.

• Informe del Observatori “Impacto de la COVID-19 en colectivos vulnerables”

• Vídeo de testimonios