Esta intervención, implementada por Cruz Roja Española y Cruz Roja Filipina, trabaja en favor de comunidades altamente vulnerables de Bangsamoro (BARMM), región del sur de Filipinas, abordando las necesidades humanitarias y de desarrollo con un enfoque integrado desde los sectores de la salud y los medios de vida. La región de Bangsamoro, que trata de alcanzar su anhelado bienestar y desarrollo tras un largo proceso de paz, se ve doblemente expuesta a factores de riesgo, tanto por la pandemia como por los conflictos en Mindanao que provocan una crisis humanitaria prolongada o crisis olvidada.

En este contexto, la acción pretende dar respuesta y mitigar los impactos de la crisis en la situación de salud, socioeconómica y de cohesión social  en la región. Se alinea plenamente a la Respuesta Global de la Unión Europea a la COVID-19, dando respuesta a los efectos inmediatos de la crisis sanitaria y las necesidades humanitarias resultantes; reforzando los sistemas de salud, agua y saneamiento; y atajando las consecuencias sociales y económicas. El proyecto fortalece las capacidades de diagnóstico y vacunación, da apoyo a personas en aislamiento y facilita apoyo psicosocial a jóvenes y personal sociosanitario entre otros colectivos.

De cara a proteger y fortalecer los medios de vida, esta intervención también incluye un conjunto de ayudas directas a familias y grupos productivos en forma de entregas de efectivo, capacitaciones, acompañamiento técnico y transferencia de bienes. Incorpora, además, la promoción de la cultura del ahorro a través de grupos autogestionados de ahorro y crédito, así como la formación técnica vocacional y promoción de la empleabilidad entre jóvenes.

Supone también una oportunidad para fortalecer la cohesión social, la participación comunitaria y las capacidades locales. Así, durante la ejecución se promueve la incorporación a programas de voluntariado comunitario y se facilitan formaciones técnicas y transversales dirigidas a la comunidad y a agentes públicos locales.

Aunque contextualizada en la crisis derivada de los impactos de la pandemia, los pilares de la acción proveen los cimientos para un impacto a largo plazo en la región, reforzando la recuperación temprana y la resiliencia comunitaria, impactando inicialmente en la salud y los medios de vida pero también fomentando efectos transversales positivos en las capacidades locales de preparación para desastres y cohesión social. Así, la acción se consolida bajo el nexo de respuesta humanitaria inmediata y de recuperación, procesos de desarrollo y construcción de paz en el medio y largo plazo, contribuyendo al objetivo del programa “MinPAD – Paz y Desarrollo en BARMM” acordado entre la UE y el Gobierno de Filipinas para “contribuir a un Mindanao pacífico, cohesivo, seguro e inclusivamente desarrollado”.

 Cruz Roja Española coordina esta acción, que se implementa junto con Cruz Roja Filipina y en cooperación con la Cruz Roja Alemana. El proyecto se encuentra principalmente co-financiado por la Unión Europea y por la Fundación Caja Navarra y el Ayuntamiento de Zumárraga.