El emprendedor Jorge Luis Parra, propietario del Restaurante El Toro en Valladolid, ha sido semifinalista en el certamen nacional “Maestro Parrillero”, representando a la ciudad en esta prestigiosa competición gastronómica. Su trayectoria profesional ha sido posible gracias a su talento, perseverancia y al respaldo del Plan de Empleo de Cruz Roja y su colaboración con MicroBank.

De origen venezolano y con una larga experiencia en hostelería, Jorge Luis Parra ha superado importantes barreras personales y laborales desde su llegada a España. Tras verse obligado a abandonar su país y enfrentar una realidad marcada por la precariedad y la incertidumbre, encontró en Cruz Roja Valladolid el acompañamiento necesario para recuperar su proyecto de vida a través del autoempleo.

En el marco del Día Mundial del Refugiado (20 de junio), su historia representa el espíritu de superación y dignidad de miles de personas que, como él, han tenido que empezar de nuevo en un país diferente.

Gracias al apoyo del Plan de Empleo de Cruz Roja —que le ofreció asesoramiento, formación y financiación adaptada a través de un convenio con CaixaBank-MicroBank— Jorge Luis pudo hacer realidad su sueño: abrir su propio establecimiento, el Restaurante El Toro, especializado en carnes rojas y técnicas de ahumado.

De la inclusión al reconocimiento profesional

El talento y la constancia de Jorge le han llevado a participar por segunda vez en el certamen “Maestro Parrillero”, donde este año representó a Valladolid frente a 52 aspirantes de toda España. Tras superar varias fases, logró situarse entre los 4 semifinalistas en la prueba final celebrada en San Sebastián el pasado 28 de mayo de 2025.

Este reconocimiento no solo valora sus dotes culinarias, sino que simboliza el éxito de un proceso de inclusión real a través del emprendimiento, impulsado desde la red de proyectos de Cruz Roja.

Un proyecto con sabor a integración

Jorge Luis abrió El Toro en plena zona centro de Valladolid, ofreciendo una propuesta gastronómica que combina tradición, innovación y productos de calidad. Además de carnes a la brasa y ahumadas, su visión es clara: generar un ambiente acogedor, con valores de equipo y compromiso mutuo.

“Quiero crear un lugar donde la gente no solo venga a comer bien, sino también a sentirse bien. Un sitio con identidad y con alma”, afirma Jorge. Su esposa, médica de profesión, le acompaña en esta aventura empresarial, convirtiendo el negocio en un verdadero proyecto familiar.

Desde Cruz Roja se destaca que Jorge Luis es un ejemplo de cómo la orientación, la formación y el acceso a microfinanciación pueden transformar la vida de una persona y generar empleo estable, sostenible y con propósito.

En este 20 de junio, su historia es también un homenaje a todas las personas que, como él, han tenido que rehacer su vida desde cero con esfuerzo, talento y una red de apoyo que cree en las segundas oportunidades.