La Cruz Roja Libanesa está trabajando, en coordinación con otras Sociedades Nacionales y la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media LUna Roja, para garantizar que se implementen medidas adicionales de prevención del COVID-19 a largo plazo, ya que los trabajadores humanitarios continúan trabajando las 24 horas del día para ayudar a las más de 300.000 personas desplazadas por el desastre, con tratamiento médico, refugio y apoyo psicológico.

Para ello ha desplegado equipos médicos de emergencia y su flota de 125 ambulancias al lugar de la explosión, rescatando a las personas heridas y proporcionando primeros auxilios. Los equipos de la Cruz Roja en el terreno han estado evacuando a pacientes de hospitales colapsados ​​e iniciando transfusiones de sangre de emergencia, mientras distribuyen alimentos, agua, kits de higiene, máscaras, guantes y otros artículos de primera necesidad. Además, está proporcionando refugio de emergencia a 1.000 familias y planea continuar albergando hasta 10.000 familias en las próximas semanas y meses.

El voluntariado y personal de la Cruz Roja Libanesa brindan apoyo psicosocial a los supervivientes y ayudan a que familiares separados vuelvan a estar en contacto a través de los servicios de restauración de vínculos familiares.