Un pulmón verde en La Rioja - Ahora

• Cruz Roja trabaja para generar entornos saludables y sostenibles y parte de su estrategia se basa en el cálculo, la reducción y la compensación de las emisiones de CO2 generadas por la propia Organización dentro de su plan +CO(mpensa)2.  La reforestación y restauración de ecosistemas naturales son aspectos clave para contribuir a mejorar la salud y la calidad de nuestro entorno. 

El lugar escogido esta vez para ello, ha sido el entorno natural del municipio de Albelda de Iregua, (La Rioja), donde está terminando una reforestación de casi 29 hectáreas, con cerca de 35.000 árboles (pinos piñoneros, encinas, robles quejigo y serbales) a lo largo de tres parcelas municipales. 

El pasado cuatro de marzo, una expedición formada por más de ochenta personas voluntarias encabezó una jornada orientada a la concienciación de la población del papel fundamental que juegan los bosques, tanto para la absorción de la huella de CO2 que, inevitablemente, todos generamos, como para contribuir a la sostenibilidad del entorno que nos rodea. Una jornada donde se plantaron 500 árboles de diferentes especies para generar un bosque mixto, compuesto por aproximadamente 150 pinos piñoneros, 100 robles quejigo, 100 encinas, 50 cipreses de Arizona, 50 cipreses comunes y 50 thuyas. 

Una sesión que forma parte de los diferentes trabajos que se están llevando a cabo en las tres parcelas que conforman el proyecto de absorción de CO2 en La Rioja para este año. Estos trabajos suponen la reforestación de unas 29 hectáreas, y se están desarrollando en el paraje de La Gargantilla. 

“Como no podemos evitar la emisión de CO2, pretendemos compensarlo mediante esta reforestación”

El proyecto total contempla la plantación de casi 35.000 árboles: 25.220 pinos piñoneros, 7.450 encinas, 1.570 robles quejigos y 500 serbales. Las toneladas de CO2 absorbidas en condiciones óptimas superarían las 5.300 toneladas, una cifra que se corresponde al 25% de las 21.000 toneladas emitidas por Cruz Roja en toda España. Esto supone un gran avance hacia uno de los grandes objetivos globales de la organización: alcanzar la neutralidad en carbono para el periodo 2020-2030. Esta reforestación se suma a otras plantaciones que la Organización inició en 2020 en diferentes comunidades autónomas. Precisamente, la comarca riojana de Ocón fue uno de los primeros territorios donde se realizaron plantaciones que tenían como objetivo, entre otros, compensar la huella de carbono que Cruz Roja genera en la propia comunidad y en Navarra.  

El responsable de Medio Ambiente de Cruz Roja en La Rioja, Gabriel Alcañiz, señala la importancia del proyecto debido a que el terreno es una zona muy expuesta a la erosión y en consecuencia, de dificultad orográfica: “intervenir en un terreno tan accidentado como este, supone un reto importante en el desarrollo de los trabajos de plantación, ya que en los lugares más escarpados se debe realizar a mano un tipo de ahoyado específico que facilite la supervivencia del plantón”, explica. 

Sin duda, la iniciativa tiene un gran interés ambiental dado que lo que pretende es contribuir a la recuperación ecosistémica del lugar mediante el uso de tipos de vegetación que mantengan el suelo y frenen esa erosión. “Como no podemos evitar la emisión de CO2, pretendemos compensarlo mediante esta reforestación”, concluye Alcañiz. 

Para el desarrollo del proyecto, Cruz Roja Española, como promotora del proyecto de reforestación, cuenta con el apoyo de empresas especializadas de referencia, tanto para el diseño y redacción del proyecto forestal y para el desarrollo y supervisión de los trabajos forestales como para el asesoramiento específico para el registro del proyecto de absorción ante el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.