Lombrices que ayudan a combatir el cambio climático - Ahora

• Eisenia es el nombre de un proyecto que acaba de ganar uno de los premios Ideateca de Cruz Roja y que une lombrices y residuos orgánicos para producir compost. Ana Salvador, directora autonómica de Medio Ambiente en Cruz Roja Andalucía, es su impulsora.  
   

Una idea puede cambiar el mundo, aunque para ello suele necesitar impulso, visibilidad y recursos. Ideateca es un espacio de Cruz Roja que busca, precisamente, cocrear e intercambiar ideas para desarrollar respuestas sociales innovadoras. Destinado a personal voluntario y trabajadores y trabajadoras de la Organización humanitaria, recientemente se revelaron los interesantes proyectos ganadores de la edición de 2023, que buscaba concretamente soluciones para afrontar el cambio climático. Una de las iniciativas galardonadas es ‘Eisenia’, liderada por Ana Salvador, directora autonómica de Medio Ambiente de Cruz Roja en Andalucía. 

Ana Salvador, que acaba de ser mamá, nos atiende por teléfono para contarnos los pormenores de un proyecto centrado en la transformación de residuos orgánicos a través del compostaje comunitario con lombrices. “Al ser la responsable de Medio Ambiente de Cruz Roja en Andalucía, me di cuenta de que teníamos pocos proyectos de economía circular, y que el tema de cuántos residuos generamos era algo que preocupaba mucho al voluntariado, personal técnico, usuarios y usuarias… Y a partir de ahí se me ocurrió esta idea que era buena, bonita y barata”, declara. 

Este proyecto no solo disminuye la huella de carbono, sino que revaloriza los residuos. Inicialmente, iba a realizarse solo en huertos, pero pronto asambleas y centros de Andalucía quisieron sumarse a él. En la actualidad, unos siete centros de Cruz Roja en Andalucía lo están usando. Ana Salvador explica exactamente cómo funciona Eisenia: “Cogemos un material reciclado, por ejemplo, un cubo de pintura, y dejamos en ella la basura orgánica, por ejemplo, una monda de mandarina, etc. Llamamos a este recipiente vermicompostera porque luego vamos a añadir las lombrices, que van a producir el vermicompost. Hay que esperar un poco, pero luego las lombrices producen todos los días esa especie de hummus que vamos retirando y que podemos usar en un huerto, en jardinería, en macetas…”, expone.  

Actualmente, siete centros de de Cruz Roja en Andalucía han implementado este proyecto para producir compost

De esta manera, “el desayuno o el almuerzo se pueden compostar y convertir en un fertilizante absolutamente natural, ecológico y sostenible a través de la lombriz roja californiana”, recalca. Lo bueno es que, además, cualquier persona puede hacerlo, puesto que con una breve formación es relativamente sencillo desarrollarlo.  

El que haya ganado uno de los premios Ideateca, además, favorece su implantación en otros territorios. “Me dio mucha alegría el premio, lo recibí muy ilusionada. Me sabía mal que fuera tan lento, porque al final las capacidades son las que son… y ya había interés, porque en un encuentro nacional de Medio Ambiente lo conté y sí llamó la atención. Sin esta ayuda era imposible llevarlo adelante. Ahora, por ejemplo, ya nos han contactado desde La Rioja para un huerto, y gracias a la ayuda económica, podremos ir y enseñarles un poco cómo funciona”, dice sin olvidar que, además de la reducción de residuos, el proyecto tiene una parte de sensibilización fundamental que también esperan que llegue mucho más lejos y a muchas más personas.