Trinidad Boeck, 70 años de amor y solidaridad - Ahora

• El apellido de esta vecina de Lora del Río (Sevilla) está unido a la historia de Cruz Roja. Desde que tuvo en las manos su primer carné de socia, supo que el camino de satisfacción que le acompañaría sería infinito. 

Su apellido a priori no suena andaluz, de hecho, es en este dónde encontramos la clave de su vinculación con el compromiso hacia los demás, pero no hay duda de que a Trinidad le corre sangre sevillana por las venas. Le sobra vitalidad y alegría para celebrar sus setenta años como socia de Cruz Roja y asegura que el compromiso es el factor clave para que los proyectos sociales salgan adelante. 

"El día antes de casarme, en 1952, me hice socia de Cruz Roja. Llevo tanto tiempo casada como con la Organización”, nos dice en este vídeo grabado el día que recibió el nuevo carné de socia, con el que se acredita y agradece sus siete décadas de amor y solidaridad.

Pero su relación con el compromiso viene de mucho antes, en forma de herencia familiar. Su abuela, también Boeck, fue enfermera y dama de la Cruz Roja belga y la encargada de transmitirle a Trinidad la pasión por la humanidad. “Ayudaba a mi abuela en todo lo que hacía, en cada cosa que participaba ahí me tenía a mí. Siempre estuve muy unida a ella”, rememora Trinidad. 

"El día antes de casarme, en 1952, me hice socia de Cruz Roja"

Unos recuerdos de juventud que asentaron las bases de lo que después acabaría siendo uno de los proyectos más importantes de su vida. Trinidad está convencida que ayudar a las personas más vulnerables es fundamental para cambiar las cosas porque como ella dice, “cuando se hacen obras de caridad, todas tienen su recompensa”. 

Menciona emocionada cuando a raíz de haber asistido a unas charlas de primeros auxilios se hizo socorrista. Tal y como remarca Trinidad, la enseñanza de estas actuaciones le han llevado a salvar vidas. Concretamente destaca una situación muy complicada cuando una mujer perdió el conocimiento y pudo darle un masaje cardiaco. “Cuando llegó el médico y la mujer ya estaba estabilizada, me presentó como la responsable de haberla traído de nuevo al mundo”, afirma. 

Trinidad muestra orgullosa su carné sabiendo que es mucho más que un documento en forma de tarjeta. Es la credencial que nos ayuda a construir una comunidad más fuerte y unida, una sociedad más saludable sinónimo de un mundo mejor.