Manel Alcaide: "Las personas sordas y las oyentes somos personas iguales que hablamos lenguas distintas" - Ahora

Nace después de que estemos más de diez años en contacto con la comunidad sorda. Teníamos una asociación en la que hacíamos talleres artísticos de integración entre niños sordos y oyentes, explicándoles que eran personas iguales hablando lenguas distintas. Esto empieza ahí, fue la propia comunidad sorda la que nos motiva a mi socio y a mi a crear una empresa para darles servicio, porque conocemos la lengua de signos.  

Empezamos así a trabajar para ellos. En una reunión en la que eran todos sordos menos yo, mi iphone vibró encima de la mesa y me dijeron que me estaban llamando, y dije no, es un mensaje, y se sorprendieron al ver que, a pesar de que el teléfono estaba boca abajo yo sabía que no era una llamada. Les expliqué que los oyentes tenemos un sonido para cada notificación. Entonces hicimos una aplicación muy sencilla, si te llegaba un mensaje de whatsapp se encendía la pantalla en verde y si era de facebook era azul. Esto nos dió más de 5.000 descargas en 22 países y fue cuando empezamos a entrevistarnos con personas sordas, ver cuáles eran realmente sus necesidades y buscar inversión para poder desarrollar la tecnología que necesitábamos para poder cubrir este problema.   

Lo sabíamos de siempre. Para nosotros la tecnología siempre ha sido lo que nos ha gustado y en lo que nos gustaba trabajar, pero desde el primer momento, cuando nosotros creamos la empresa, en los propios estatutos ya pusimos unas cláusulas sociales y desde el primer momento nos hicimos B Corp. De hecho somos una de las primeras B Corp de España y estamos en el top 10 a nivel de puntuación, tenemos una puntuación de casi 115 puntos, que es muy alta para una B Corp.  

Nosotros no vemos otra forma de hacer empresa, pensamos que la empresa se hace con las personas, no a costa de las personas. Eso lo teníamos muy claro desde el primer día, tanto mi socio como yo. Así ha sido la filosofía desde siempre, hemos buscado inversores que tuviesen también esta filosofía para que nunca se perdiese ese impacto. A nosotros no solo nos mueve el dinero, sino generar un impacto positivo en la sociedad, cuidar el medioambiente, a nuestros trabajadores y sobre todo a la comunidad a la que vamos dirigidos. De hecho B Corp, nos ha nombrado dos años seguidos the best of the world en la categoría customers y ahora en 2022 nos han vuelto a dar el galardón. Esperamos que en el 2023 podamos volver a conseguirlo.  

En 2015 surge una idea, pero el proyecto se inicia en 2017. Nosotros teníamos otra empresa. En enero del 2017 fue cuando recibimos una inversión y decidimos dejar la actividad anterior y dedicarnos a esto. Ahí empezamos a desarrollar la tecnología y estuvimos 3 años trabajando en I+D+i. La aplicación la tuvimos lista en diciembre  de 2019 cuando instalamos el primer edificio, en enero de 2020 el segundo y en febrero de 2020 el tercero.  

Llegó la pandemia y se congeló todo. Fue muy duro para nosotros, tuvimos que reducir la plantilla a la mitad, decidimos quedarnos con solo una de las líneas de producción. Pero la verdad es que en 2021 empezó a reactivarse; una de las cosas que puso la pandemia encima de la mesa fue la falta de accesibilidad, y más con las personas sordas y el uso de mascarillas, para ellas fue un caos. Tuvimos situaciones muy desagradables en los hospitales sin poderse comunicar con el personal, gente que salía del coma y tardaba más de 13 días en saber que le estaba pasando. Fue una situación muy angustiosa y decidimos centrarnos en los edificios públicos y dejar un poco de lado la solución para el hogar. Ahora en el 2022 ha habido un cambio muy interesante, tenemos más de 400 proyectos abiertos tanto con Administración pública como con empresas privadas y hay muy buenas proyecciones.  

Todo tipo de barreras. Desde las más obvias, como la detección del llanto de un bebé para una mamá o papá con pérdida auditiva hasta alertas de seguridad. O algo tan fácil como ir a un hotel y tener que llevar mi propio despertador, porque no puedo activar un servicio de despertador para que me despierten a una hora determinada. Situaciones como gente que ha perdido un vuelo por culpa de esta situación y luego se lo tienen que pagar de su bolsillo. Al final no es solo autonomía o seguridad, sino que a cualquier cliente se le debería prestar el mismo servicio, independientemente de su discapacidad. La persona sorda no paga menos, paga lo mismo y tiene el mismo derecho.  

Nosotros considerábamos fundamental que fuese la empresa o entidad privada o pública la que adquiriese la tecnología y pagase por la tecnología y que los usuarios la pudiesen utilizar de una manera gratuita.  

Compras el dispositivo, llega a casa y la aplicación te ayuda a configurar las alertas. Hay dos tipos de sonido, los metálicos y los orgánicos. Los sonidos orgánicos ya están preconfigurados en el sistema, por ejemplo el llanto del bebé. Cada bebé llora de una forma distinta. Aquí tuvimos que hacer una campaña muy bonita llamada “lágrimas por sonrisas” donde miles de mamás nos enviaron audios de sus bebés llorando para poder reconocer estos llantos. Estos sonidos orgánicos ya están pre-configurados dentro, pero cuando es un sonido metálico, por ejemplo el timbre de la puerta, es el usuario quien tiene que grabarlo. La aplicación les dice, por ejemplo, graba el sonido del timbre 3 veces y luego envíanos el sonido. A partir de ahí se generan los modelos y podremos reconocerlo.  

Este trabajo del día a día con las personas sordas te hace aprender mucho. Hicimos una videollamada con una clienta que compró el sistema, estaba muy enfadada porque no le funcionaba bien el timbre, decía que no iba, entonces le pedimos escuchar las grabaciones a ver si había sucedido algo, le dijimos que tenía el aire enchufado y hacía mucho ruido, por lo tanto si llaman al timbre y está el aire puesto, el sonido no es el mismo y no lo identifica bien, por lo tanto le pedimos volver a grabar los audios sin el aire encendido. Esto nos dió una idea, estamos haciendo grabar sonidos a personas sordas ¿por qué no ponemos un gráfico en la pantalla que les ayude a saber si hay o no ruido en casa? O si el timbre funciona o no funciona.  

Sí, tenemos muchas. Recuerdo una que nos hizo llorar a media empresa. Había una familia en Valencia, una pareja, papá y mamá sordos y una niña oyente de 3 años que estaban probando el sistema en su hogar. Nos escribieron una carta donde decían que esa misma tarde su hija había llorado y estaba muy contenta porque nuestro sistema le había avisado, pero también nos decía que su hija tenía 3 años, y que llevaba 3 años utilizando un dispositivo para detectar el llanto y que esa tarde no le había avisado, entonces la mujer dijo, “en estos 3 años, ¿cuántas veces mi hija ha llorado y yo no he ido a atenderla?”. Ya sabéis lo que esto puede significar para unos padres, la angustia de saber esto... Entonces esta historia nos hizo que dejáramos una precisión del 97% en la detección del audio del llanto del bebé y no la quisimos subir al 100%, porque este 3% a veces son gatos. El sonido de un gato maullando puede ser muy parecido a un bebe llorando. Esta mujer fue la que nos hizo reflexionar y decidir dejarlo en el 97% para que no vuelva a pasar esta situación de que el bebé llora y nadie lo atiende.  

Nosotros hemos desarrollado un algoritmo de reconocimiento de sonidos. Aquí quiero hacer un inciso, no tiene nada que ver el reconocimiento de sonidos con el reconocimiento de voz, parecen muy similares pero son dos cosas muy distintas. Cuando hablamos de reconocimiento de voz se trata de vocales que pertenecen a  una palabra, dentro de una frase, dentro de un idioma, pero ya está, yo solo tengo cuatro escalones. Y además tengo una serie de información que es predictiva, yo sé que la frase tiene sujeto verbo y predicado o que si te digo “hola, buenos días” probablemente me vayas a contestar lo mismo. Sin embargo cuando hablamos de reconocimiento de sonido no sabemos cuándo se va a producir ese sonido, si ese sonido se va a solapar con otro, por donde viene ese sonido. Por lo tanto, el algoritmo debe ser capaz de discernir todos los sonidos, coger el que le interesa analizarlo y actuar en consecuencia, y esto es lo realmente complejo. De hecho, nosotros somos una de las pocas empresas en el mundo que está trabajando el reconocimiento de sonidos y la única que lo hemos enfocado al tema de la accesibilidad.  

Nuestra tecnología está patentada en España, EE.UU., Israel, Argentina, Australia y Japón y está en proceso en otros 44 países, la intención a finales de este año es empezar con la internacionalización.