El 30 de septiembre de 2019 la sanidad española implementó la Profilaxis Preexposición (PrEP) frente a la infección por el VIH, convertida hoy en un tratamiento con resultados muy eficaces.

En marzo de 2020 se puso en marcha el Sistema de Información de Programas de Profilaxis Preexposición al VIH (SIPrEP), con el objetivo de monitorizar el desarrollo y resultados de esos programas, conocer las características, su evolución clínica y la efectividad. Especialmente, es importante analizar los motivos que llevan a la interrupción de la PrEP y los cambios en la adherencia, para que eso suceda lo menos posible en el futuro.

Once comunidades autónomas están proporcionando datos para saber sobre la puesta en marcha de esta iniciativa, y la idea es lograr más implicación. 

La PrEP es la utilización diaria de fármacos antirretrovirales, antes de iniciar una práctica sexual, para prevenir la infección por el VIH. Previo al comienzo del tratamiento lo primero que se debe descartar es la infección por VIH. También se debe realizar un cribado de las demás ITS (gonorrea, sífilis, hepatitis, clamidia).

Todas estas medidas se complementan con un seguimiento médico exhaustivo para controlar reacciones adversas (por ejemplo: realizar pruebas renales) y garantizar la óptima adherencia.

En estos cinco años, participaron del programa 23.670 personas y, actualmente, hay otras 2.000 en seguimiento y evaluación, según los datos aportados por el Ministerio de Sanidad (División de Control de VIH, ITS, Hepatitis Virales y Tuberculosis) con la colaboración del Instituto de Salud Carlos III. Proyecto SIPrEP - SIPrEP (isciii.es)
 

En un 20 % de los casos las personas que accedieron a la PrEP lo hicieron mediante un centro de atención primaria o de diagnóstico de VIH e ITS, lo que demuestra la importancia de estos lugares para promocionar el programa.

Entre un 6-8% fueron diagnosticadas de infección por clamidia, gonorrea y sífilis en la visita inicial, lo que destaca la validez de estos planes para el diagnóstico y tratamiento de las demás ITS.

Otra información que se obtuvo indica que un cuarto de las personas usuarias de la PrEP había consumido algún tipo de drogas durante los tres meses previos de comenzar el programa, un 13% de ellas, mediante la práctica de chemsex.

Un 13% interrumpieron el programa por diversos motivos, aunque los más frecuentes, fueron la subestimación del riesgo de las prácticas desprotegidas y por cambio de domicilio.

La seroconversión al VIH fue muy poco frecuente, sucedió en tres casos; de los cuales una de las personas había presentado problemas de adherencia a la PrEP.

Medidas complementarias

Reducir las prácticas de exposición a las ITS debe ser una de las medidas complementarias imprescindibles de la PrEP.

Además, hay que tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

•  Diagnóstico precoz y tratamiento de la infección por VIH y demás ITS.

•  Uso del preservativo.

•  Actualización del estado vacunal (hepatitis A y B).

•  Evaluación de consumo de drogas.

•  Educación sexual y consejo asistido.

Apuntes finales

La eficacia de la PrEP está ligada a un exhaustivo control y seguimiento de las personas usuarias. Un uso incorrecto puede conducir a la infección por VIH y a desarrollar resistencia a los antirretrovirales y otras complicaciones clínicas.

Los fármacos de este tratamiento (deben estar autorizados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios) no se pueden adquirir sin la prescripción de profesionales de la medicina. Solamente se dispensan en servicios de farmacia hospitalaria o en centros asistenciales que autorice cada comunidad autónoma.

Fuentes:

La Profilaxis pre Exposición (PrEP) frente al VIH cumple 5 años como programa de éxito en salud pública (isciii.es)

MANUAL_PREP.pdf (sanidad.gob.es)