Una Tamborrada por la inclusión - Ahora

• Cada 20 de enero se celebra el día grande de San Sebastián, la capital guipuzcoana. Con motivo de ello y al ritmo de tambores y tradición, el Centro de Día Algara quiso sumarse a la fiesta con la famosa y popular tamborrada.  

La tradicional tamborrada donostiarra es pura alegría y celebración. Consiste en una serie de desfiles de tambores y replicantes que van tocando piezas de forma prolongada, intensa y acompasada, tanto de día como de noche, en espacios públicos de pueblos y ciudades. Acercarse a la cultura de un pueblo, ciudad o país, a través de sus tradiciones, es la mejor manera de conocer lo que esconde un lugar y sus habitantes, y esto es por lo que apostaron en el Centro de Día Algara con una tamborrada por la inclusión.

El Centro de Día Algara, es un servicio conveniado con la Diputación Foral de Gipuzkoa, que tiene el objetivo apoyar y facilitar los procesos de inclusión social a personas en situación de exclusión, fomentando el máximo grado de autonomía personal y su integración en la sociedad. Para ello, realizan actividades que les acercan a la cultura vasca, tales como cursos de aproximación a la gastronomía vasca, clases de castellano o actividades de participación comunitaria como, en este caso, la tradicional Tamborrada. “Estoy muy contenta de participar en esta actividad. Soy marroquí y gracias a Algara he tenido la oportunidad de conocer la Tamborrada y además poder participar en ella. Al principio ha sido un poco complicado aprender las diferentes marchas pero gracias a los ensayos que hemos realizado he conseguido aprender”, comenta Touria Agbar, usuaria del Centro de Día Algara.  

“A pesar de las situaciones complicadas por las pasan las personas extranjeras que se encuentran en el Centro de Día, su participación en estas actividades hace que se sientan mejor a nivel emocional y además, ayudamos a visibilizar y demostrar que estas personas están aportando su granito de arena a la sociedad”, asegura Nuria Medina, psicóloga y técnica de Programa de Acogida e Inclusión Social. En esta Tamborrada especial participaron también personas usuarias y personal técnico de otros programas del área de Inclusión Social de Cruz Roja en Gipuzkoa. “Yo suelo pasar por allí dos días a la semana para ayudar en lo que haga falta. Vísperas del gran día me invitaron a la Tamborrada y no pude decir que no. Las personas que dirigimos llevamos los trajes militares napoleónicos y el resto de personas su disfraz de cocinero tal y como manda la tradición; con esto a punto y tras varios ensayos previos, fue todo un éxito, cada pieza sonaba mejor que la anterior”,  apunta entusiasmado José Ignacio Azpiarte, voluntario de Cruz Roja y Tambor Mayor en la Tamborrada. 

Y de esta manera, nutriéndose de la cultura de otros rincones del mundo es como el Centro de Día de Algara ha conseguido que sus participantes se sientan parte de esta tradición donostiarra que ya ha traspasado fronteras. “La Tamborrada nos acerca más a la cultura de aquí y me siento muy animado y agradecido por la oportunidad de tener nuestra propia Tamborrada”, cierra animado Abdessamad Sahnoun, una de las personas usuarias.