El reto de mantener los mares limpios - Ahora
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- Enmarcada dentro del proyecto LIBERA, la recogida de residuos en las costas es una de las principales líneas a seguir en Cruz Roja; una iniciativa que también incluye el muestreo de aguas y limpieza de fondo marino. Así es cómo lo hacen en Ceuta.
Costa, mar y fondo marino. En Ceuta, el proyecto LIBERA (fruto de una colaboración entre Cruz Roja, SEO/BirdLife y Ecoembes) abarca fundamentalmente estos tres ecosistemas. Y es que, para que podamos disfrutar de las playas y los mares en verano, debemos asegurarnos de que estén libres de residuos no solo durante los meses estivales. La basura no entiende de estaciones y es igual de importante realizar tareas de limpieza fuera de temporada. De la misma forma que los montes se mantienen durante todo el año para evitar los incendios en verano, Cruz Roja también se encarga de vigilar y limpiar nuestros ecosistemas marinos.
Víctor es referente del área del Medio Ambiente en Cruz Roja Ceuta. Cuenta que la recogida de residuos marinos en las costas, en el ámbito terrestre, se da cuatro veces al año y concretamente en dos playas de la ciudad. Los residuos no únicamente se recogen, sino que también se clasifican, se obtienen datos y estos se envían a su vez al MITECO. “Es una forma científica, de alguna forma, de hacer una comparativa entre lo que sacas el primer trimestre, el segundo… y así”, explica.
Gracias a los kayaks, por otro lado, recogen residuos flotantes. Al igual que en el caso anterior, estos se registran en una ficha y se pesan. Como particularidad de este año, se ha incluido el muestreo de agua marina, lo que se traduce en pasar una serie de filtros por las zonas donde acuden en kayak para averiguar si existe presencia de microplásticos.
También desarrollan su actividad en el fondo marino. Los residuos que allí se encuentran no son muy diferentes a los de las costas. “Tenemos que partir de la base de que el 80% de los residuos que llegan al mar son terrestres”, cuenta Víctor. “Un compañero que bucea con nosotros dice que la basura de algunos es el tesoro de otros. Cuando encontramos algo especialmente curioso en el fondo del mar, decimos que es un ‘tesoro’”, añade.
La mayoría de voluntariado que hace limpieza de fondo marino tiene formación acuática
Una piscina hinchable, motos, impresoras… son algunos de estos elementos. “Una variedad que no veas”, dice Víctor. Y bolsas de plástico; residuos procedentes de la pesca como anzuelos; resto de ropa, abrigos o zapatos; embarcaciones y muchas latas. De hecho, y en base a los residuos que se recogen es posible trazar la conducta de las personas que han pasado por la zona. “Cuando te encuentras latas de bebidas isotónicas, o bebidas alcohólicas… piensas en la demanda social que existe detrás de estos residuos”.
Respecto al tipo de voluntariado que hace limpieza de fondo marino, Víctor expone que la mayoría proceden de Salvamento Marítimo y, por tanto, tienen formación acuática. Pero si hay alguien que se acerca a Cruz Roja y tiene inquietud por enfocarse en este ámbito (“por ejemplo, alguien que hace esnórquel”), se trata de hacer alguna actividad asequible con la supervisión de una persona formada en socorrismo acuático y en una zona segura. Incluso ha llegado alguna persona que ha realizado apnea (es decir, la suspensión voluntaria de la respiración dentro del agua). “Por norma general, la mayoría que participamos tenemos experiencia”, dice el referente de Medio Ambiente de Cruz Roja Ceuta.
El pasado 25 de octubre se realizó la última limpieza de fondo marino. La previsión es que arranque de nuevo la recogida de basuras en el mar en mayo, aunque Víctor reflexiona que tampoco se descarta hacer alguna en invierno, para formar a voluntariado, y también para revisar algunas zonas. Mientras tanto, los consejos son los de siempre, que no por habituales resultan menos necesarios: reducir el consumo, comprar solo lo que se necesita, y tener conciencia para evitar todo lo posible que los residuos lleguen a las costas y al mar.
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