Las familias vulnerables, las que más sufren la pobreza energética - Ahora

• El proyecto Pobreza Energética de Cruz Roja persigue ayudar a aquellos colectivos en riesgo o en situación de extrema vulnerabilidad que padecen problemas energéticos en la vivienda, ya sea por no comprender la factura de la luz, o por no disponer de recursos para poder optimizarla. Además, y en algunos casos, se rehabilitan hogares o se distribuyen electrodomésticos para dar un impulso a estas familias más vulnerables.

En 2021, Cruz Roja ha atendido a más de 8800 familias; dándoles asesoramiento personalizado sobre eficiencia energética en el hogar, repartiendo 8818 kits de microeficiencia, capacitando a 7545 y ejecutando rehabilitaciones energéticas en 309 hogares. De ellas, 87 familias lo han hecho en la provincia de Castellón, en el proyecto de Pobreza Energética. Los hogares de seis de ellas, además, han sido intervenidos para rehabilitar partes de la casa o suministrar electrodomésticos. La pobreza energética sigue siendo un tema sobre la mesa recién arrancado este 2022 y es que, como explica Cristina Barreda, responsable provincial de Medio Ambiente en Castellón, venimos de un año “muy complejo”, donde la factura de la luz ha causado estragos en buena parte de la ciudadanía.

Por eso, precisamente, las acciones que se enmarcan bajo el proyecto de Pobreza Energética de la Organización son especialmente necesarias en este momento. Además de orientar a las familias a optimizar la factura de la luz (ajustando la potencia, cambiando la tarifa, solicitando el bono social), se realizan talleres de ahorro energético para entender la factura de la luz y consejos para rebajarla, o auditorías para saber cómo gestionar la energía en hogar. A ello se suma la entrega de kits de microeficiencia y, en los casos más graves, rehabilitaciones en hogares de familias en situación vulnerable, que abarcan desde cerramientos de ventanas hasta humedades pasando por la resolución de problemas de seguridad eléctrica.

Entre otros temas, se realizan talleres de ahorro energético o se entregan kits de microeficiencia 
 

“Entre los materiales que aportamos hay bombillas LED para sustituir las incandescentes o halógenas (que son las que más consumen), regletas para el tema de standby de los electrodomésticos, temporizadores para que puedan programarlos en las franjas periódicas más baratas…”, explica Cristina Barreda. “En algunos casos, también hacemos rehabilitaciones o entrega de electrodomésticos para sustituir otros, o ayudamos a que puedan comprar alguno si se les ha estropeado”, corrobora. En el caso de las rehabilitaciones se suele contar con profesionales para valorar su viabilidad.

Pese a que este proyecto de Cruz Roja no tiene un marco geográfico o temporal concreto (se lleva a cabo anualmente en todo el territorio nacional), su vigencia es de rabiosa actualidad. “Los horarios, por ejemplo, se han ido cambiando y modificando, y mucha gente no entiende muy bien dónde están los mayores costes para poder controlarlos. Al final, el 2021 ha sido muy malo en cuanto a subida de precio de la luz e impacto en personas con una situación de extrema vulnerabilidad. Por eso también les contamos que existe el bono social, o les ayudamos a solicitarlo”, cuenta. 

Las familias no podrían estar más agradecidas ante la ayuda que presta Cruz Roja. “Son inversiones que, a veces, no pueden asumir porque están en situaciones muy complicadas. Apoyarlas es muy importante”, concluye la responsable provincial de Medio Ambiente de Cruz Roja Castellón.