Veinte años de solidaridad: la historia de Aarón Rodríguez - Ahora

• Aarón Rodríguez es voluntario de Cruz Roja Bizkaia desde el año 2002. Atesora casi dos décadas en la Organización, con una pandemia mundial de por medio (que se dice pronto). Hoy en día, sigue con la misma ilusión con la que entró. Porque, afirma, el voluntariado enriquece.

“Que veinte años no es nada”, cantaba Gardel, para vaya sí lo son. Es la cifra, redondeada, que lleva Aarón Rodríguez como voluntario de Cruz Roja Bizkaia. Su aproximación a la Organización fue de la mano de un profesor de Informática y Matemáticas del instituto que era voluntario del grupo de rescate de montaña. Fue, asegura, quien le introdujo el “gusanillo”. Pero el año en el que entró, el 2002, también fue significativo por otro motivo: el desastre del Prestige.

Casi veinte años después, y a punto de cumplir 37 años, Aarón Rodríguez se acuerda perfectamente de lo sucedido. “Entré en el momento en que se hundió el Prestige. El 112 solicitó ayuda de Cruz Roja para visitar las playas e ir viendo cómo avanzaba el chapapote. Si este había entrado en la costa, enviaban a las brigadas de limpieza de la diputación. La verdad es que era una labor algo tediosa, porque había que ir mañana y tarde”, recuerda. Aquella fue, sin duda, su particular “encrucijada”: ese momento decisivo en el que dio un paso al frente para llevar su solidaridad hasta donde hiciera falta. Aarón fue también uno de los voluntarios que participaron en el rodaje de la segunda parte de Encrucijada junto al actor Emilio Buale. Encrucijada es la campaña de sensibilización de voluntariado puesta en marcha por Cruz Roja, que da continuidad así a la ya generada en 2020 protagonizada por grandes actores y actrices.

Hoy en día, sigue en activo. Aunque ha pasado por muchos ámbitos distintos dentro de la Organización, en la actualidad reparte su tiempo entre el departamento de Socorros y Emergencias, donde cubre servicios preventivos, y las redes sociales de Cruz Roja en Bizkaia, que cuentan con no pocos seguidores (solo en Tik Tok acumulan más de 125 mil followers). “La verdad es que funciona bien”, admite Aarón. Por el camino, y especialmente durante la pandemia y el confinamiento, se encargó de gestionar los excedentes de alimentos que se repartieron como parte del Plan Cruz Roja RESPONDE.  

Si hay algo que le aporte el voluntariado, dice, es el “enriquecimiento humano”. “Te ayuda a dormir mejor: te quedas con la conciencia muy tranquila cuando ayudas a una persona que necesita de tus recursos”, comenta. Y eso sucede cuando participa en alguna atención a alguien en una ambulancia; o cuando llamó, durante el 2020, a personas que no podían salir de casa por el confinamiento para acompañarlas desde el otro lado de la línea telefónica. 

Por eso, cuando se le pregunta a Aarón Rodríguez por una anécdota, las emociones se acumulan. Es prácticamente imposible elegir. Veinte años no es nada o, quizá, lo es todo. Y por muchos más.