Un juguete, mil valores - Ahora

• La campaña 'Sus derechos en juego' ha conseguido dotar a más de 50.000 niños y niñas de juguetes educativos

Jugar es un derecho. Un medio que utilizamos en la infancia para alcanzar nuestra condición humana, según explica el psicólogo José Luis Linaza. Está recogido en la Declaración de los Derechos de la infancia firmada en 1959 por los Estados miembros de la ONU. El juego ayuda a los niños y niñas a desarrollarse emocional, intelectual y socialmente. Les enseña a interpretar y comprender el mundo que hay a su alrededor y a relacionarse con los demás.

Desde una perspectiva psicológica, los juguetes no son contemplados como premios o castigos, son herramientas que, en un futuro, habrán provisto de valores a niños y niñas fomentando su sano crecimiento y su desarrollo. Paula Rivarés, directora de Cruz Roja Juventud, la sección juvenil de Cruz Roja Española, formada por niños, niñas y jóvenes de edades comprendidas entre los 6 y los 30 años, asegura que “lo que se adquiere con los juegos es la tolerancia a la frustración, el saber cómo compartir… Esos valores que enseña Cruz Roja”. 

Una de las campañas que más visibilidad y más alcance tiene dentro de la organización es la que se desarrolla durante las fechas navideñas bajo el nombre ‘Sus derechos en juego’ para dotar a las familias en dificultad social con niños y niñas a su cargo, de juegos y juguetes. Una acción que va mucho más allá del reparto de juguetes. “El principal fin de esta acción es promover el uso de juegos y juguetes como herramienta educativa y de transmisión de valores en el contexto escolar y familiar”, apunta Rivarés.  Este año se han superado todas las expectativas y se han conseguido más de 81.000 juguetes para 54.385 niños y niñas vulnerables, gracias a la colaboración de más de 1.800 personas voluntarias. Además, casi 11.000 familias han asistido a talleres de sensibilización, tanto presenciales como online.

Cruz Roja Juventud es la responsable de esta campaña englobada dentro del proyecto “El Juguete Educativo” que se lleva a cabo durante todo el año, y que tiene como objetivo asegurar el derecho al juego de niños y niñas entre 0 y 18 años, así como sensibilizar sobre la importancia del juego y el juguete, y su incidencia en el desarrollo evolutivo.

¿Para qué sirven los juguetes? 

Los niños y niñas viven jugando. El juego es una manera de recrear la realidad que les rodea potenciando aspectos positivos de su personalidad, expresando sentimientos o despertando su capacidad de imaginación, lo que contribuye a su formación como personas. Los juguetes transmiten valores, de ahí la importancia de fomentar entre los niños y niñas aquellos que defiendan una forma de entender el mundo encaminada a crear adultos emocionalmente sanos y responsables.

Según Teresa de la Iglesia, trabajadora de Cruz Roja y psicóloga clínica, “el juego debe ser una de las principales actividades que realicen el niño y la niña durante el día, siempre que entendamos el juego como una actividad libre”. De hecho, es de uno de los instrumentos más efectivos para la educación y un elemento clave para generar confianza y empatía.  

El juego es una manera de recrear la realidad que les rodea potenciando aspectos positivos de su personalidad

Jugar durante el confinamiento 

El Estado de alarma puso de manifiesto algunas carencias que se vivieron en el seno de muchas familias. “Una de las demandas con que nos encontramos era que los adolescentes no tenían herramientas para jugar y lo que hizo Cruz Roja Juventud fue dotar a las familias de actividades concretas para edades de entre 14 y 17 años, una franja compleja”, explica Paula Rivarés. 

Durante los meses que duró el confinamiento, Cruz Roja Juventud entregó más de 7.000 juguetes a familias con pocos recursos, al mismo tiempo que elaboró y entregó a las familias la guía Imagina con Cruz Roja, una herramienta para enseñar a padres, madres y personas educadoras cómo pasar el tiempo junto a sus hijos e hijas de una forma divertida y educativa. 

Estos juguetes fomentan los valores que defiende Cruz Roja 

Nuevos, preferiblemente educativos, no bélicos, no sexistas y medioambientalmente sostenibles.  Así son los juguetes que demandaba Cruz Roja en su última campaña.

Un juguete educativo es aquel que fomenta el trabajo en equipo y el compañerismo. Es capaz de permitir la interacción entre los niños y niñas para potenciar la socialización y la aceptación de las normas. Por su parte, los juguetes no bélicos favorecen la tolerancia y el respeto hacia los demás. En el otro extremo se sitúan los juguetes que trasladan mensajes estereotipados y sexistas que provocan que los niños y las niñas se desarrollen en pensamientos de desigualdades sociales a nivel sexista o racista. Al escoger juguetes que no trasmitan estas actitudes, se apoya la diversidad de culturas, cuerpos, colores de piel e incluso profesiones.

Cruz Roja Juventud reconoce la importancia del juego en el desarrollo de la infancia. El acceso al juego es un derecho de todos los niños y las niñas, y para facilitar el que puedan tener aquellos juguetes que más se adecúen a sus necesidades nació la Guía El Juguete Educativo dirigida a todas aquellas personas que interactúan con la infancia.