Cruz Roja analiza, pormenorizadamente, todos los aspectos que pueden condicionar la seguridad de las personas que disfrutan de este entorno natural. Al margen del entorno más próximo y de la propia lámina de agua, es muy importante estudiar los comportamientos de las personas que acuden a la playa. 

Nuestro principal reto es la prevención, promoviendo actitudes seguras entre las personas usuarias que visitan la playa. Esto nos permite estar en contacto permanente con todas las personas que disfrutan de este entorno natural. Dentro del ámbito de la prevención y con el objetivo de obtener el catálogo de riesgos habituales en la playa, Cruz Roja analiza los siguientes parámetros:

»  Afluencia de personas e histórico de incidencias registradas

»  Núcleos de población cercana

»  Condiciones habituales del mar

»  Características físicas y entorno de la playa

»  Actividades deportivas y de recreo que conviven en la playa objeto de estudio

»  Existencia de balizamientos en las zonas de baño.

Nuestra dilatada experiencia en el ámbito nos permite contar con una amplia red de recursos humanos y materiales, adaptados a las necesidades del servicio y orientados a minimizar los riesgos. Esta situación nos convierte en asesores de la Administración, para dimensionar de la manera más adecuada los RRHH y RRMM necesarios en la cobertura del riesgo.
 

Nuestro Plan de riesgos está desarrollado con documentos en los que se prevé la organización de la respuesta ante situaciones de emergencias, las medidas de protección, intervención a adoptar y las secuencias de actuación.

Cruz Roja pone al servicio de las personas que visitan la playa, a todo su personal cualificado y material adecuado, para dar la mejor respuesta a todas aquellas que lo necesiten. Tanto desde el punto de vista sanitario como social. Nuestra labor se centra en salvar todas las barraras existentes para que las personas disfruten de un baño seguro. Para ello, nuestro personal, a través de su capacitación y de las ayudas técnicas dispensadas en las zonas de baño y ocio adaptado, damos soporte a las personas con movilidad reducida. Además, cada año, estamos muy atentos a la búsqueda de personas (niños y adultos) que se puedan desorientar en la playa.

El personal de Cruz Roja que desarrolla su labor en las playas, así como los RRMM dispensados, están perfectamente adaptados a las situaciones de rescate a las que deben enfrentarse a diario.

La gestión de la información es una prioridad en la actualidad para nuestra Institución. Contamos con diversas aplicaciones informáticas donde almacenamos toda la información de interés de nuestra actividad diaria. Esta información está a disposición de la población en general y del promotor del servicio.

Es primordial poder evaluar periódicamente la calidad del servicio que estamos prestando. Para ello, al margen de las evaluaciones internas de la Institución, empleamos encuestas de satisfacción para conocer la opinión de los usuarios de la playa. Además, nuestros SERVICIOS DE PREVENCIÓN DE ACCIDENTES, SOCORRISMO Y ASISTENCIA EN PLAYAS cuentan con las CERTIFICACIONES ISO 9001 y 14001, lo cual nos permite establecer un nivel de calidad óptimo.