Para estar en guardia contra el frío, viste o usa: 

• Ropa abrigada, no apretada y que traspire. Preferiblemente viste varias prendas ligeras superpuestas en capas en lugar de una sola de tejido grueso. 

• Gorros que cubran bien la cabeza y las orejas, guantes y bufandas. 

• Calzado antideslizante y calcetines gruesos. 

• Vestimenta impermeable que te proteja del viento y de la lluvia. 

Para estar en guardia contra el frío, centraliza las actividades en el exterior durante las horas más cálidas del día: 

• Evita salir durante las horas más frías del día, especialmente temprano en la mañana o al anochecer. 

• Si tienes que permanecer en exteriores: 

  • procura moverte con frecuencia para generar calor corporal, pero sin realizar esfuerzos físicos excesivos. 

  • busca refugio en lugares cálidos y protégete del viento y la humedad, evitando transitar por zonas congeladas. 

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Para estar en guardia contra el frío, mantén el calor en el hogar: 

• Cierra puertas y ventanas para evitar que entren corrientes de aire o agua. 

• Usa cortinas gruesas y baja las persianas por la noche para conservar el calor. 

• Permanece en las estancias más calientes de la casa (provistas de radiador, calefacción…) y abrígate con mantas. 

• Ventila las estancias a diario, especialmente las que estén provistas de braseros de carbón o chimenea. 

• Asegúrate del buen funcionamiento de las estufas, mantenlas alejadas de tejidos o elementos inflamables y apágalas durante la noche. 

Para estar en guardia contra el frío, hay que aplicar ciertos hábitos durante los viajes: 

• Viaja en transporte público o, si lo haces en coche, en compañía. 

• Evita, en la medida de lo posible, viajar en condiciones meteorológicas adversas. 

• Previo al viaje: 

  • infórmate de la situación meteorológica y del estado de las carreteras, así como de los puntos de descanso o refugio.  

  • asegúrate del adecuado funcionamiento del vehículo (neumáticos, frenos, luces, etc.), de que el depósito está lleno y de llevar cadenas. 

  •  carga la batería del móvil. 

• Durante el viaje: 

  • utiliza la calefacción, pero ventila el interior periódicamente (cada 1 o 2 horas) durante unos segundos. 

  • descansa y lleva líquidos azucarados y calientes si el viaje es largo. 

  • ten cuidado con los cambios bruscos de temperatura que se producen al entrar o salir del coche. 

  • no dejes a niñas, niños, personas mayores ni animales en vehículos estacionados. 

Para estar en guardia contra el frío, existen medidas para proteger nuestra salud: 

• Consulta con tu médica o médico de referencia acerca de las medidas suplementarias a adoptar si padeces alguna enfermedad de riesgo. 

• Sigue tomando tus medicamentos. No te automediques. 

• Mantén el contacto con las personas consideradas más vulnerables (llamadas o visitas) para poder valorar su situación concreta y prevenir efectos graves de las bajas temperaturas.