Tres cómics, tres historias de mujeres refugiadas - Ahora

• Cruz Roja en Albacete y tres ilustradores se han basado en las vivencias de varias mujeres refugiadas para dar forma a tres cómics que se inspiran en sus valiosas historias. El objetivo es visibilizar y concienciar sobre este colectivo. 

Tres historias de mujeres refugiadas. Tres cómics. Y un objetivo: visibilizar una realidad que a veces queda relegada a un segundo plano. Es lo que ha sucedido recientemente en Cruz Roja en Albacete, donde varias historias de mujeres refugiadas se han convertido en ilustración a través de tres cómics. Para ello, se han recogido los testimonios de distintas mujeres usuarias de la Organización y se han simplificado, encontrando sus similitudes, en tres relatos que se inspiran en sus vivencias. Tres ilustradores, por otro lado, han dado forma, color y trazo a ello, y han creado tres cómics tan impactantes como emotivos que se presentaron el pasado 20 de junio coincidiendo con el Día Mundial de las Personas Refugiadas. 

Para encontrar las raíces de este emblemático proyecto, sin embargo, hay que remontarse un poco más atrás en el tiempo, hasta 2021. En ese momento, y enmarcado dentro del Programa de Personas Refugiadas de Cruz Roja, surgió la idea, entre las personas usuarias y las voluntarias, de recabar historias y plasmarlas de alguna forma. Cuando se les propuso a las mujeres refugiadas contar su vida, estas comenzaron a escribir sus experiencias y los motivos que las habían llevado a solicitar asilo en España. Algunas procedían de países hispanohablantes; otras no, pero sus motivos de huida, eso sí, resultaban similares.  

“Las personas voluntarias vieron que tenían mucho potencial”, explica Beatriz Mañas, responsable de Personas Refugiadas de Cruz Roja en Albacete, y añade que la necesidad de visibilizar al colectivo fue la que las condujo hasta el resultado final. “Conchi, directora de Marca y Comunicación en Cruz Roja en Albacete, propuso ilustrarlas”, añade Mañas, y así se contactó posteriormente con los ilustradores, que de manera altruista se sumaron al proyecto. 

Javier Rosique, Roberto Borrón y Alejandro Artesero no lo dudaron: quisieron poner su lápiz al servicio de la iniciativa. “Cuando vi por primera vez el relato, me pareció una historia muy dura. Intenté mantener la narración en primera persona. De hecho, es prácticamente igual a cómo me llegó, pero adaptada a cómic para que no fuera redundante”, expone Alejandro Artesero, uno de los dibujantes. “A cualquiera que le guste contar historias de género social le llega mucho este tipo de proyectos. Cuando tienes la oportunidad de contar una historia así sientes que tiene un valor de verdad”, añade.  

Los cómics se pueden encontrar en los siguientes enlaces: Azhar, por Javier Rosique; Valentina, por Roberto Borrón y María Fernanda, por Alejandro Artesero.