Próxima parada: la igualdad de género - Ahora

• Un viaje en tren tiene algo evocador, provoca una sensación que lleva a muchas personas a estar con ellas mismas, a pensar e incluso a replantearse ciertos aspectos de su vida o de su día a día. De esta idea parte uno de los últimos talleres realizados por la Unidad de Género de Cruz Roja en Guipuzkoa con el nombre “Bienvenidos y bienvenidas a un viaje sobre la igualdad de género”. 

Al acceder a la sala y siguiendo con la idea del viaje, los y las participantes se convirtieron durante dos horas en pasajeros y pasajeras del tren. “Llegaban y en función de los conocimientos y la postura que consideraban tener sobre la igualdad de género se situaban en primera, segunda o tercera clase, una vez colocados comenzábamos a orientar los temas para ir generando debate a través de los conocimientos y realidades de cada persona”, explica Ruth Acosta, técnica en Cruz Roja en Gipuzkoa y encargada del taller. 

Más de 10 personas, tanto voluntariado como personal técnico realizaron este viaje, un trayecto que pretendía invitar a la concienciación mediante diferentes dinámicas sobre género y salud con el objetivo de promover la reflexión sobre los estereotipos y roles implantados en nuestra sociedad. “Fue una manera muy amable de hacer un análisis personal en relación a estas cuestiones, en un principio podrías tener clara tu postura, pero a medida que avanzaba el taller te ibas replanteando las cosas y eso fue lo bonito”, comenta la participante, además de técnica del área de Salud y voluntaria de la Organización, Amaia Urkiza.  

A medida que se avanzaba en las dinámicas, los y las pasajeras del tren iban cambiando de clase, lo que se traduce en que a través del debate, juntos iban superando estereotipos y rompiendo barreras instauradas en la sociedad. “Se plantearon cuestiones sobre el papel de la mujer en los cuidados, así como datos referentes a que la tasa de suicidio en hombres es tres veces mayor que la de las mujeres, ya que en muchas ocasiones estos tienden a expresar menos sus emociones y evitan pedir ayuda”, apunta Ruth Acosta. Cuando pensamos en igualdad de género se nos va a la mente hacia las mujeres, pero el rol que ocupan los hombres en la sociedad también es importante tenerlo en cuenta. 

Salir de la realidad individual para conocer otras más alejadas fue la clave del éxito del taller. “Conseguimos un tono neutro y orgánico que invitaba al entendimiento y a la escucha, al final entendimos que los vagones del tren no eran estáticos, que no hay vagones de primera, segunda o tercera clase, sino que hay ideas diversas que viajan de un vagón a otro y en nuestras manos está escucharlas, aplicarlas a nuestra vida o dejarlas ir para ir avanzando”, cierra la encargada del taller.