Oasis de mariposas para mejorar la biodiversidad - Ahora

• Un proyecto piloto de Cruz Roja en Bizkaia impulsa espacios que atraigan a mariposas, unos insectos clave para nuestra biodiversidad. El objetivo, además, es acercar la naturaleza a la ciudadanía para que se implique más en su cuidado. 

Las mariposas son unos insectos capaces de medir la biodiversidad de un espacio. “Son bioindicadores de la calidad ambiental de nuestro entorno”, coincide Yolanda Martín, bióloga y voluntaria de Cruz Roja en Bizkaia, que puntualiza que, “de todos los insectos que polinizan las plantas, el 40% son mariposas”. Hablar con ella de mariposas no es casual, y es que son estos insectos los que protagonizan un proyecto piloto de Cruz Roja que lleva como título el sugerente nombre de ‘Oasis de Mariposas’. 

En colaboración con el Ayuntamiento de Bilbao, y bajo la iniciativa de la Asociación ZERYNTHIA, los ‘Oasis de Mariposas’ buscan proteger y fomentar la presencia de mariposas y otros polinizadores clave para el ecosistema. Estos espacios estarán ubicados a partir de este mes de noviembre en los Jardines Salesianos del barrio de Sarriko, en el parque de Ibaieder en La Peña y en el parque Eskurtze en Irala y, aunque el invierno es una época difícil para atraer a las mariposas, Yolanda Martín es optimista. 

“Hay muchas especies de mariposas"

“Hay muchas especies de mariposas; muchas son visibles en primavera y verano, pero también hay especies que podemos ver en invierno… Algunas se reproducen dos veces al año, otras solo una”, ejemplifica para evidenciar la variedad de mariposas que existen. “Muchas suelen aparecer de mayo a septiembre, otras hibernan en fase de oruga o crisálida… hay diferentes ciclos, ¡es un mundo muy interesante”, reflexiona Yolanda. Con todo, pueden aparecer algunas especies de mariposas de invierno y el objetivo a partir de ahora es plantar especies autóctonas que soporten bien el clima de Bilbao (como romero, tomillo, ruda o hinojo) para atraerlas, y proporcionar cobijo y alimento a las orugas. 

Cada 15 días se irá valorando la evolución del oasis, que estará ubicado, concretamente, en áreas soleadas y protegidas del viento, condiciones que favorecen la reproducción y refugio de mariposas. A partir de ahí, estudiar el entorno y su evolución será esencial. “A lo mejor una mariposa pone huevos, a los 4-10 días aparecen las orugas y estas sirven de alimento a otros invertebrados, pájaros, etc.”, plantea la bióloga. Tampoco hay que olvidar otro punto importante del proyecto, ya que las mariposas “van a convertirse en el alimento de otros animales”, algo que también aumentará la biodiversidad en los parques urbanos. “Hay muchos ‘Oasis de Mariposas’ en toda España. Ayudan a mejorar la biodiversidad de los parques, acercan la ciencia a la ciudadanía, y es un proyecto que permite hacer un seguimiento a futuro porque tendremos que ver las plantas que vamos introduciendo, qué tipo de polinizadores atraen y qué especies de mariposas aparecen…”, indica Yolanda.  

Una ciudadanía más concienciada 

Hacer que la ciudadanía se comprometa más y mejor con nuestro entorno es otro de los objetivos de la iniciativa. “Las personas que van a esos parques urbanos van a poder conocer de cerca el proyecto. Colocaremos un cartel donde se explicará todo, con fotos grandes, y el tipo de mariposas más comunes. Es una forma de que las personas aprendan”, concluye Yolanda, que ya avanza que hay mucho interés por parte de los medios de comunicación y las personas que conocen de oídas el proyecto. Desde aquí (por supuesto) también seguiremos con atención la llegada de la primera mariposa.  

“Este proyecto ayuda a que las personas comprendan la interconexión entre la biodiversidad y su bienestar”, explican desde el área de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Bilbao. Por otro lado, “las mariposas son polinizadores esenciales y verlas prosperar en nuestros parques nos recuerda la importancia de proteger nuestro entorno natural”, estiman desde el área de Movilidad y Sostenibilidad.  

El mantenimiento de estos espacios será responsabilidad de Cruz Roja a través de su voluntariado, que supervisará el crecimiento de las plantas, controlará posibles apariciones de plagas y realizará un seguimiento de los polinizadores y mariposas, reportando la información a la Asociación Zerynthia. Las vallas de maderas instaladas alrededor de los oasis, por último, protegerán las plantas y evitarán la intervención de factores externos que podrían perjudicar su desarrollo.