Las dificultades de vivir en la España despoblada - Ahora

• Las zonas rurales de España sufren. Lo hacen porque su población envejece, no existe un relevo generacional, y la ausencia de servicios básicos genera un panorama muy complejo. Un informe de Cruz Roja analiza todos estos factores y aporta soluciones para enfrentarse a esta problemática.

Cruz Roja acaba de publicar un informe sobre la España despoblada (que se puede descargar aquí), un monográfico que recoge la situación de personas atendidas por la Organización, y que se encuentra enmarcado en un contexto donde la vulnerabilidad ha crecido a causa de la pandemia de la COVID-19. Presentado este miércoles, el evento ha contado con diferentes personalidades que han explorado las casuísticas de las zonas rurales en España y han tratado, desde el optimismo y la esperanza, de encontrar soluciones para afrontar esta situación.

Así, en la mesa redonda que se ha organizado, han participado Javier Senent, presidente de Cruz Roja; Carlos Casares, secretario general de FEMP; Juan Manuel Serrano, presidente del Grupo Correos; Juana López, directora general de Políticas contra la Despoblación en la Vicepresidencia Tercera del Gobierno de España - Ministerio para la Transición Económica y el Reto Demográfico, y Carmen Morenés, directora general de Fundación Telefónica. 

Entre los datos que se han comentado, destaca que, actualmente, en el 53% del territorio solo vive el 5% de la población; además, la densidad es inferior a 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado. A ello se suma que España es el país con más superficie despoblada del sur de la Unión Europea. Para revertir esta situación, desde el informe se aportan soluciones con las que han coincidido la mayor parte de ponentes, que han expresado también su punto de vista al respecto.

“La despoblación es uno de los retos más severos y complejos al que nos tenemos que enfrentar la sociedad española a corto y largo plazo. A mayor despoblación, menos recursos y servicios públicos; y, ante menos recursos y servicios públicos, mayor despoblación consecuentemente”, ha evidenciado Estrella Rodríguez Pardo, directora de Estudios e Innovación Social de la Cruz Roja y una de las personas que ha participado en la confección del informe. También, ha recalcado, las vulnerabilidades son las mismas que en las zonas urbanas, pero el entorno, en estos contextos rurales, “fragiliza más”.

Javier Senent, presidente de Cruz Roja, ha recordado el papel de la Organización en las zonas rurales. Por ello, ha mencionado que frente al envejecimiento de la población, desde Cruz Roja se apuesta por la tecnología, “como la teleasistencia para atender a las personas vulnerables”, ha precisado. La presentación del informe, con las intervenciones de todas las personas participantes, se puede encontrar aquí. 

Actualmente hay 130 medidas planteadas para combatir la despoblación y garantizar la cohesión territorial y social que cuentan con un fondo de 10.000 millones de euros. Por todo ello, las personas que han intervenido han coincidido en concluir que la cooperación entre agentes, administraciones públicas, empresas y territorios resulta crucial para implantar las medidas más oportunas y lograr, de esta forma, combatir la despoblación en las zonas rurales.