Por un cacho de turrón - Ahora

• La iniciativa ‘Por un cacho de turrón’ pretende que nadie se quede sin este alimento en estas fechas tan destacadas. Cruz Roja se encarga de la parte logística del proyecto. 

Todo el mundo debería disfrutar de un pedazo de turrón en estas fechas tan señaladas. Bajo ese pretexto, la iniciativa ‘Por un cacho de turrón’ lleva la friolera de dos décadas recaudando donaciones de turrón y dulce para la población más vulnerable de la isla de Gran Canaria. Nicolás Jiménez, voluntario de Cruz Roja y peluquero de renombre, fue el impulsor del proyecto, que cuenta con Cruz Roja en la parte logística, encargada de almacenar y distribuir los dulces a lo largo del mes de diciembre. 

En ediciones previas se han llegado a repartir cerca de 10 toneladas de dulce a aproximadamente 300 familias y 150 personas mayores, y este año la cifra parece similar. “Gracias al contacto que tenemos con las personas vulnerables a las que atendemos todo el año, podemos entregar estos packs de turrón, que siempre son bien recibidos”, comenta Julio García, presidente de la asamblea local de Cruz Roja en Las Palmas de Gran Canaria, que puntualiza que se están recogiendo también productos “sin azúcar” para poder entregárselo a personas mayores con más restricciones a la hora de comer, y que durante el resto del año la organización está al lado de los colectivos vulnerables mediante tarjetas monedero y otros recursos. José Víctor González es un buen amigo de Nico Jiménez, que este año se encuentra indispuesto por temas de salud, y ahora se está encargando de liderar la campaña. “Nicolás es nuestro Papá Noel, con razón ha recibido tantos galardones y es hijo predilecto de Las Palmas de Gran Canaria. Fue su nieta la que le pidió comida para los más necesitados, y a él se le ocurrió la recogida de productos navideños”, explica José Víctor, que cuenta al principio recogían los turrones en la peluquería de Nico y después la iniciativa fue haciéndose más y más grande, hasta acabar colaborando incluso con Unión Deportiva Las Palmas y otras entidades y tiendas locales.  

Su éxito ha sido tal que otras provincias de Canarias, como Tenerife, se han puesto en contacto con ellos para saber cómo incorporar el proyecto en sus territorios. “Al final, solo somos 4 amigos que querían hacer algo, y ahora se ha convertido en todo un hito para la ciudad”, declara José Víctor.