Garantizar los derechos de la infancia, una responsabilidad compartida - Ahora

• Cada 20 de noviembre se conmemora el Día Internacional de los Derechos de la Infancia. Un momento idóneo para dejar claro que el cumplimiento de los derechos de los niños, niñas y adolescentes no es una opción, sino que sustenta la base de su vida, su desarrollo y su bienestar. 

En 1989, la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó la Convención sobre los Derechos del Niño, el tratado más ratificado internacionalmente, que establece que todos los niños y niñas tienen derechos fundamentales, como por ejemplo,  a vivir protegidos, a la salud y la educación, a expresar su opinión, a jugar y desarrollarse en un entorno seguro, y a que todas las decisiones que les afecten se tomen teniendo en cuenta su interés superior.

Para Cruz Roja esta fecha es mucho más que un día en el calendario. Es una oportunidad para reafirmar su compromiso con la garantía de estos derechos. Y es que la Organización trabaja cada día para mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y adolescentes, protegiéndoles frente a situaciones de vulnerabilidad y fomentando su participación activa en la sociedad y en la toma de las decisiones que les afectan. 

Y entre la multitud de actividades, programas y proyectos que la Organización realiza junto a la infancia y adolescencia, el proyecto de acogimiento familiar cambia vidas. Y es que no todos los niños y niñas tienen la oportunidad de pasar su infancia en un hogar que les brinde afecto, cariño y estabilidad. Las situaciones que llevan a la infancia a esta realidad pueden ser infinitas, por eso Cruz Roja, con el apoyo del Ministerio de Juventud e Infancia y financiación del  Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 y de las Administraciones Territoriales, trabaja desde hace más de 35 años para tratar de ofrecer a la infancia y adolescencia una segunda oportunidad a través del proyecto de acogimiento familiar. 

El acogimiento familiar es una modalidad de cuidado alternativo del sistema de protección a la infancia cuya finalidad es proporcionar a los niños, niñas, adolescentes desde los cero hasta los 17 años un entorno familiar que sea estable, seguro y protector cuando las circunstancias les impiden desarrollar su vida con su familia de origen. 

Hoy celebramos el Día de los Derechos de la Infancia.
Porque si pudieran rebobinar el tiempo, volverían justo ahí: a la risa, al abrazo, al gesto que les hace sentirse seguros.
Escuchar, cuidar, acompañar…son las formas más bonitas de proteger sus derechos. Más información en… pic.twitter.com/mxwhu3bpBF

— Cruz Roja Española (@CruzRojaEsp) November 20, 2025

Además, la Organización cuenta con el servicio multicanal SerAcogedorA que facilita que cualquier persona interesada en el acogimiento familiar pueda contactar con profesionales especializados. A través de esta plataforma online, se resuelven dudas y se ofrece información de manera gratuita y anónima, acompañando a las familias en cada paso del proceso. 

En el último año, más de 1.100 familias han recibido formación, orientación y acompañamiento a través de este proyecto, que se desarrolla en seis comunidades autónomas, 20 provincias y 22 localidades.

Cuando la infancia también sufre

Por desgracia, no todas las historias de infancia son de protección y cuidado. La violencia vicaria, que se ejerce sobre los hijos e hijas menores de edad para hacer daño a sus madres, también vulnera de manera extrema los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Este tipo de violencia atenta, entre otros,  contra su derecho a la protección frente a todo tipo de abuso, su derecho a la salud, su derecho a expresar su opinión y, en casos extremos, su derecho a la vida y al desarrollo.

Hoy, en el Día Mundial de los Derechos de la Infancia, hablamos sobre violencia vicaria, una violencia que se ejerce contra la madre, pero que daña de forma directa a niños, niñas y adolescentes.

Es violencia. Y vulnera sus derechos. Conocerla es el primer paso para… pic.twitter.com/aAzKSLtGR0

— Cruz Roja Juventud (@CRE_Juventud) November 20, 2025

La violencia vicaria destruye infancias y deja cicatrices profundas. Por eso, visibilizarla y actuar para erradicarla es fundamental. La infancia tiene derecho a crecer en condiciones dignas, con educación, salud y seguridad; sus derechos no son opcionales, son universales y deben ser defendidos por toda la sociedad. Con el apoyo de las adminsitraciones públicas, la Organización también puso en marcha hace cinco años el proyecto ‘Alzando la Voz', una iniciativa de autoexpresión y empoderamiento de niños, niñas y adolescentes hijos e hijas de mujeres víctimas de violencia de género. 

En definitiva, el 20 de noviembre es un día clave para recordar que la defensa de los derechos de los niños, niñas y adolescentes es una responsabilidad compartida.