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Elena García Armada: “Ver la sonrisa de un niño que pasa de una silla de ruedas a caminar te cambia la vida”
A MIRADA DE
ELENA GARCÍA ARMADA
“Ver la sonrisa de un niño que pasa de una silla de ruedas a caminar te cambia la vida”
ELENA GARCÍA ARMADA
21/06/2022
ESCRITO POR:
ENTREVISTA POR:
Silvia Llorente
21/06/2022
ESCRITO POR:
ENTREVISTA POR:
Silvia Llorente
Doctora en Robótica

Elena García Armada ha logrado alcanzar, junto a su equipo, un reto nada desdeñable: desarrollar el primer exoesqueleto pediátrico del mundo. Doctora en Robótica e ingeniera industrial por la Universidad Politécnica de Madrid, también es cofundadora de la empresa Marsi Bionics, donde da rienda suelta a su pasión por acercar los exoesqueletos a la infancia. Es, además, investigadora científica del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en el Centro de Automática y Robótica, y acumula 20 años de experiencia en investigación en robots que caminan. También ha recibido más de 35 reconocimientos por su labor excelente en ciencia y transferencia tecnológica. Recientemente ha obtenido una de las Medalla de Oro de Cruz Roja 2022. Nos cuenta en qué consiste exactamente su labor y cómo ayuda a niños y niñas. 

Doctora en Robótica

¿De dónde viene tu interés por la robótica? 

Desde pequeña siempre he sido muy creativa. Me apasionaban los juegos de construcciones y todo lo que fuera montar y desmontar y arreglar cacharritos. Y la robótica es una forma extraordinaria de solucionar problemas desde la creatividad que es, por definición, la capacidad o facilidad para inventar o crear. Eso hacemos en el campo de la robótica, creamos algo desde la nada, lo programamos y lo ponemos a funcionar. Es gratificante.   

Conocer a Daniela, una niña que quedó tetrapléjica tras un accidente de tráfico, supuso un punto de inflexión en tu carrera. ¿En qué te cambió y cómo recuerdas ese momento? 

Ver la sonrisa de un niño que pasa de una silla de ruedas a caminar te cambia la vida. Es pasar a poner la tecnología robótica al servicio de quienes más lo necesitan. Esas sonrisas en la cara de los niños y en la de sus padres es lo más emocionante de mi carrera profesional. 

Y sí, gracias a Daniela, hoy existe Marsi Bionics. Con ella, descubrimos que la robótica puede ser el mejor aliado para ayudar a caminar. Los exoesqueletos ponen la fuerza, la estabilidad y el control que el cuerpo ha perdido. Pero, además, con lo que estábamos investigando vimos que éramos capaces de desarrollar dispositivos que fueran mucho más allá de un andador supletorio. Es decir, no íbamos a hacer una silla de ruedas con piernas si no exoesqueletos para rehabilitar, para ayudar, para recuperar la marcha. 

Junto a tu equipo, has desarrollado el primer exoesqueleto biónico del mundo para niños y niñas con parálisis cerebral y enfermedades neuromusculares. Y con tecnología, además, 100% española. En primer lugar, ¿qué es exactamente un exoesqueleto biónico? Y en segundo lugar, ¿en qué ayuda a los niños y niñas con este tipo de problemas? 

El exoesqueleto es un dispositivo que se adapta al cuerpo del niño para ponerle en situación de bipedestación y marcha. Sus motores imitan el funcionamiento del músculo natural y su comportamiento se adapta a la condición muscular del niño.  

Con ello y una terapia basada en el juego logramos importantes beneficios clínicos en el niño. Hablamos de mejoría respiratoria, fortalecimiento de la musculatura torácica y cefálica que conllevan retrasar las complicaciones musculoesqueléticas de sus patologías. Pero, para nosotros, es vital el cambio que se produce a nivel psicológico y de desarrollo personal: mejora la atención en la escuela, en su sociabilidad, en su motivación, en su autopercepción e, incluso, en la autonomía para realizar actividades cotidianas como comer por sí mismos. Y estos cambios son tanto o más importantes que los físicos porque estamos hablando de niños en pleno proceso de crecimiento personal.

¿Por qué decidiste dedicarte especialmente a niños y niñas y cómo viven estos momentos en los que prueban el exoesqueleto? 

Cuando empezamos la investigación comprobamos que no había nada en el mundo enfocado al paciente pediátrico. Toda la tecnología robótica estaba orientada a los adultos. Sin embargo, los niños se veían desplazados de las posibilidades que tiene la robótica para mejorar su calidad y esperanza de vida.  

¿Y cómo lo viven los niños? Con una inmensa sonrisa en la cara que contagia a la familia, a los terapeutas…. Es muy emocionante ver cómo un niño que lleva toda su vida en silla de ruedas da sus primeros pasos.  

Actualmente, una parte importante de tu trabajo es fabricar dispositivos orientados a mejorar la movilidad de niños y niñas con atrofia muscular, tetraplejía o enfermedades neuromusculares degenerativas. ¿Cómo es un día normal en tu vida? 

El día a día tiene mucho de rutina. Como empresa, hay mucha labor de dirección, de buscar financiación que, al final, consume mucho más tiempo del que me gustaría. 

Suponemos que habrá muchos momentos de prueba y error y muchos retos en los procesos. ¿Cómo os enfrentáis a ello para ir superándolos? 

En una empresa con un alto componente de I+D como la nuestra el ensayo-error y el reto son constantes. Forman parte del proceso. Siempre pensamos en qué podemos hacer mejor, qué podemos aportar para ser más eficaces.   

"LA ROBÓTICA ES UNA FORMA EXTRAORDINARIA DE SOLUCIONAR PROBLEMAS DESDE LA CREATIVIDAD"
FotoCita

¿Por qué los robots, en lugar de suponer una amenaza para la sociedad, pueden mejorarla? 

Los robots han nacido, han crecido y han madurado con el único fin de ayudar al ser humano. Llevan casi setenta años entrenándose para ese fin. La tecnología robótica está al servicio del ser humano. 

Muchas mujeres se topan con un techo de cristal que les impide situarse en puestos de liderazgo y poder en el ámbito científico. En tu caso, que eres CEO y cofundadora de Marsi-Bionics, ¿cómo crees que podríamos combatir esta situación? 

El techo de cristal está muy presente en el campo de la investigación. Tenemos más dificultades para ascender en las escalas científicas, cuanto más arriba, menos mujeres. Y en proyectos de transferencia tecnológica como es Marsi-Bionics nos encontramos con la cruda realidad: proyectos liderados por mujeres reciben menos financiación. Romperlo es complejo. Es cultural y es una transformación social que verá sus frutos en los próximos años. Y lo que tenemos que hacer los que nos lo hemos encontrado es hacer pedagogía para aportar a ese cambio social. 

Suponemos que a lo largo de estos años de trayectoria profesional te habrás encontrado con casos de éxito e historias increíbles. ¿Nos podrías contar alguna especialmente emotiva o especial? 

Lo difícil es elegir una. Cada niño que ha utilizado el exoesqueleto tiene una historia que contar. Hablamos de niños y niñas que tiene un despertar cognitivo, cirugías que se retrasan, abrazos que ahora se dan con fuerza, juegos que antes eran impensables, o estados anímicos que se muestran más alegres, más felices, con más confianza. Cada niño tiene una historia de éxito. 

Hemos leído que próximamente se abrirán las puertas de un gran centro de terapia para rehabilitación de la marcha en pacientes pediátricos y adultos. ¿Podrías adelantarnos algo más?  

Estamos trabajando en lograr poner en marcha un centro donde los niños que no pueden caminar lo hagan con nuestros exoesqueletos dentro de un espacio dedicado al juego. Es decir, un espacio donde puedan jugar y moverse orientados por los fisioterapeutas y donde los padres tengan también un papel especial. Es cambiar el concepto del gimnasio de rehabilitación a algo más parecido a un parque o un patio de juegos. Para poner en marcha este proyecto dependemos de un partner que nos ayude con algo tan bonito.  

 

[Copyright de las imágenes: Oficina Europea de Patentes. Fotos de Amador Toril Diaz]

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