“Mi objetivo es que la gente juegue, se mueva y pase un buen rato” - Ahora

• Carlos Muñoz Bueno es un jubilado catalán y voluntario de Cruz Roja que decidió dejar los grandes núcleos urbanos para irse a vivir a Tarazona (Zaragoza) con su hija, su mujer y con algo más y muy especial, su amor por la petanca.  

Tarazona, la capital del Moncayo, carecía de afición por la petanca hasta que Carlos Muñoz llegó a la ciudad. Hasta allí llevó su afición por este juego que, aunque pueda parecer conocido, allí no pensaban lo mismo. “Al principio fue curioso porque muy poca gente conocía la petanca y yo no me lo podía creer”, comenta Carlos.

Carlos quería hacer partícipe a los vecinos y vecinas, de esta actividad. Por ello, cada mañana se levantaba a hablar con la gente del pueblo y se acercaba a los bares para intentar que alguien se animara a jugar. Un día, por fin, le dieron algo de esperanza. Le dijeron que había una pista de petanca, pero que estaba abandonada. Él, ilusionado y tras conocer esta información comenzó a ir a jugar. “Las personas mayores me veían, yo los animaba a jugar conmigo y así empezó un poco todo”, asegura Carlos Muñoz. Carlos, al no disponer de grandes redes para promover su implantación, se dirigió a Cruz Roja que enseguida le acogió y apoyó su iniciativa dentro del Programa de Salud y Hábitos Saludables. “Es un deporte sencillo, fácil y que fomenta el contacto intergeneracional”, afirma Laura Royo, técnica de desarrollo territorial de Cruz Roja en Tarazona.  

Esta actividad se ha ido divulgando en colegios y entre usuarios y usuarias de más edad de Cruz Roja hasta el día de hoy. Ahora, gracias a las ganas de Carlos por crear un espacio de ocio, cuentan con camisetas personalizadas y un club de petanca con una veintena de personas que se reúnen los miércoles y viernes a jugar. “Te mueves, disfrutas de buena compañía y sales de la rutina, formas parte de algo”, dice Carlos.  

Tarazona, hoy, cuenta con dos pistas de petanca, una en el parque Pradiel, que se encontraba abandonada y que con ayuda de la Asamblea de Tarazona de Cruz Roja y el Ayuntamiento consiguieron acondicionar, así como otra más céntrica y accesible para toda persona que se anime a jugar. “Al final no es la petanca en sí, es todo lo que se crea alrededor de esta actividad”, se sincera el voluntario.  

Después de lo conseguido, Carlos no se conforma y junto a Cruz Roja quieren extender la idea a otros municipios cercanos, pertenecientes al Reto 1213 y la España Despoblada, con el objetivo de fomentar la participación ciudadana a través de un deporte gratuito, ameno y para todas las edades.  “Queremos hacer una liguilla entre localidades, sabemos que no es fácil, pero estamos en el camino”, se despide Carlos invitándonos a una partida.