‘VOLUNTADES’, un fotolibro para mirar de frente al sinhogarismo - Ahora
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- Alrededor de 37.000 personas se encuentran en situación de sinhogarismo en España. Victoria Abón, fotógrafa y profesora en la Escuela de arte de San Telmo (Málaga) vivió una situación casual que le hizo sacar a la luz un libro fotográfico que reflejase una realidad a la que se le sigue dando la espalda.
Victoria Abón estaba paseando una noche por Málaga cuando de repente se topó con una furgoneta de Cruz Roja. Se detiene y observa que están atendiendo a personas que estaban durmiendo en la calle. “Me llamó mucho la atención el trato amable y cercano hacia esa persona. Hasta le hablaban por su nombre… Al llegar a casa me puse a investigar y descubrí que eran personas voluntarias de Cruz Roja que varios días a la semana realizaban un servicio de Atención a Personas Sin Hogar. Me pareció una labor encomiable y muy poco conocida por la gente de a pie”, explica la fotógrafa.
El interés de Victoria Abón por este colectivo fue creciendo y decidió elaborar un proyecto que diera visibilidad a la labor de Cruz Roja, así como a la situación de sinhogarismo que atraviesa nuestro país. “Lo presenté al presidente provincial de Cruz Roja en Málaga, Luís Utrilla, le gustó mucho y me dió el sí para realizarlo y ponerme en contacto con las técnicas de Cruz Roja responsables en esta área de intervención”, concreta Victoria.
A partir de ese momento nace ‘VOLUNTADES’, un fotolibro que se ha ido construyendo a lo largo de dos años y que ha querido dar visibilidad a esos contratipos en los que cualquier persona se puede encontrar a lo largo de su vida: voluntario y persona sin hogar. Como bien expresa Victoria en palabra e imagen, el personal voluntario son personas normales, de distinta procedencia, educación y formación, sin cuya labor desinteresada ninguna entidad podría llevar a cabo este tipo de acciones tan importantes para la sociedad. Y a su vez, las personas sin hogar son personas normales, de distinta procedencia, educación y formación, a la que la vida les ha dado un revés y han acabado sin trabajo, sin dinero, sin familia y mal viviendo en la calle. “La labor de Victoria ha sido muy delicada, ha sido muy respetuosa y ha tratado de mostrar que la realidad de las personas sin hogar va más allá de los prejuicios que nos creamos. Muchas de ellas son personas con carreras o con experiencia laboral que la vida se les ha truncado y se han visto en la calle. Victoria más allá de fotografiarlos les ha escuchado”, cuenta Miguel Ángel, voluntario del servicio de Atención a Personas Sin Hogar de Cruz Roja en Málaga.
Durante el proceso de creación, Victoria estuvo acompañando al personal voluntario durante sus salidas para conocer de cerca la labor y aprender a mirar de frente a una realidad de la que estamos desconectados y de la que preferimos no ser parte. “Sacar una cámara en una situación así no es fácil. Por eso, he trabajado con el máximo respeto hacia todos. En muchas salidas no saqué la cámara. Nunca he realizado fotos si las personas me decían que no querían aparecer. A las personas que quisieron participar les expliqué el proyecto y nunca les dije cómo debían colocarse, solo les pedían que mirasen a cámara. Cada uno posaba de manera espontánea, y curiosamente me encontré con muchas sonrisas, personas que pese a su situación, me regalaban una sonrisa franca e incluso cariñosa. ¡Algo que me sorprendía y a la vez me conmovía! Me resultaba incluso extraño, pero... ¿Quién soy yo para decirles cómo tienen que posar? ”, expresa agradecida Victoria.
El fotolibro ‘VOLUNTADES’ tiene dos partes diferenciadas. La primera, el fin principal del proyecto, son los retratos. Con ellos se pretende poner cara a unos y otros, voluntariado y personas sin hogar, para transmitir humanidad y cercanía a cualquiera que los mire. “Son en blanco y negro para que sean atemporales y los voluntarios no llevan chalecos ni ningún símbolo que los identifique, ya que los retratos de unos y otros se van cruzando y mezclando, de tal manera que solo el pie de foto nos permite saber quién es quién”, detalla la fotógrafa.
- Victoria Abón fotografiando a Carlos, voluntario de Cruz Roja
- Victoria Abón fotografiando a Nicole, persona en situación de calle
La segunda parte muestra el trabajo que realizan las personas voluntarias. Un trabajo que les lleva por sitios muy diversos y nada los detiene para llevar a cabo su labor y atender a todas las personas posibles. Poderse acercar a una labor tan delicada como es la que realiza el personal voluntario de Cruz Roja junto a las personas sin hogar es todo un aprendizaje vital difícil de olvidar. “Victoria ha sido una más, ha dedicado tiempo a las personas sin hogar, les ha ofrecido una escucha activa y muchos de ellos han seguido preguntando por ella”, relata el voluntario.
“Durante este proyecto me he hecho más consciente de lo poco humana que es nuestra sociedad, ignorando a personas que nos molestan porque "afean nuestras calles", sin pararnos a pensar que esa persona no está ahí de manera voluntaria y que cualquiera de nosotros puede verse un día en esa situación. La gran mayoría de los y las voluntarias me comentaban que la necesidad más grande que tiene la persona sin hogar es charlar, sentirse escuchados, una mirada, ser tratados como personas”, remarca Victoria.
Este fotolibro cargado de sensibilidad y reivindicación sigue dando su fruto, pero pretende dar un paso más. Ahora, tanto al equipo de Cruz Roja en Málaga como a Victoria Abón les gustaría hacer una exposición con los retratos presentes en el libro para que viajara por todo el país y sirviera para seguir dando voz a esta cruda realidad.

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