Atípico rescate a un delfín en una playa de Guipúzcoa - Ahora

• Un equipo de Cruz Roja en Getaria (Guipúzcoa) ha atendido a un delfín varado en una playa. Gracias a su rápida actuación, el animal ha podido volver a alta mar sin ningún tipo de complicación. 

El pasado 16 de agosto llegó una llamada muy particular a Cruz Roja por parte del SOS Deiak (el equivalente al 112 en País Vasco): un delfín estaba varado en la playa de Santiago de Zumaia (Guipúzcoa). Rápidamente, el equipo (compuesto por 3 voluntarios) salió disparado hacia la playa. “Nos encontramos al animal en la orilla, un poco en el agua, moviéndose con fuerza, intentando salir… La policía que había en la playa le estaba ayudando, pero por lo que fuera no lo conseguían”, explica Manu Sanz, voluntario de Cruz Roja en Salvamento Marítimo de Getaria, localidad situada a apenas 15 minutos en coche de Zumaya.

 Actuaron con diligencia. Como a priori el animal no presentaba ninguna herida ni nada que indicara que estuviera enfermo, había que devolverlo cuanto antes a mar adentro. “Parecía simplemente que se había desorientado”, expone Sanz. Utilizaron para ello una camilla con flotadores, de dimensiones grandes, donde colocaron al delfín. “Con el material que tenemos vamos improvisando ante estos avisos, el abanico de lo que puede pasar es muy grande”, señala el voluntario de Cruz Roja. Una vez en la camilla, lo sujetaron y remolcaron en la embarcación hasta llegar a unos dos kilómetros de distancia, donde finalmente lo soltaron con la esperanza de que fuera capaz de orientarse. “Se fue nadando y no hemos vuelto a saber nada, así que entiendo que le fue bien”, expresa Sanz. 

“Parecía simplemente que se había desorientado”

A pesar de que pueda parecer extraño, no es la primera vez (tampoco será la última) que los rescates a animales se dan en este contexto. “El año pasado un perro se le escapó a su dueña en una zona de acantilados, y se quedó a media altura en una pared. Tuvimos que bajarle al agua y luego subirle al barco”, cuenta como ejemplo y evidencia: “Cada aviso es un mundo”.