Preservar la salud mental en la población afectada por el conflicto de Ucrania - Ahora

• Una de cada cinco personas ucranianas se verán afectadas por problemas de salud mental como consecuencia del conflicto y de los desplazamientos asociados, según declara la Organización Mundial de la Salud (OMS). La Federación Internacional de la Cruz Roja.

Tras casi dos años de conflicto, millones de personas ucranianas, tanto dentro del país como en los países que han dado asilo a aquellas que abandonaron Ucrania, están afectadas por algún problema de salud mental. El duelo o las pérdidas, el aislamiento o los traumas derivados de los enfrentamientos están provocando graves síntomas de ansiedad, depresión y estrés. Si no reciben tratamiento y apoyo adecuado, los ciudadanos y ciudadanas se enfrentan a efectos duraderos que podrían perjudicarles a ellos, a sus familias y a sus comunidades. 

En el marco de esta situación, la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), en calidad de coordinadora, junto con las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja en 25 países y con el apoyo del Centro de Referencia para el Apoyo Psicosocial (PS Centre) de la FICR, tiene como objetivo proporcionar apoyo integral a más de 590.000 personas durante un periodo de tres años. Las personas a las que se dirige el proyecto no son solo personas desplazadas tanto dentro como fuera de su país de origen (sobe todo personas cuidadoras, niño, niñas y adolescentes, personas mayores y personas con discapacidad), sino también personal de Cruz Roja y personas voluntarias, además de la sociedad de los países de acogida.    

El proyecto busca promover el apoyo psicosocial entre las comunidades afectadas, generar un mayor conocimiento sobre la salud mental de aquellas personas que viven y han vivido de cerca un conflicto y ofrecer recursos sobre salud mental y apoyo psicosocial (guías, capacitaciones, videos, etc) a todas aquellas personas que lo necesiten. El programa prevé fortalecer las capacidades y habilidades de las personas afectadas, fomentar su autocuidado y divulgar la importancia de los primeros auxilios psicológicos (PFA). 

El proyecto está financiado por la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea con 28,5 millones de euros. En él participan 24 países de la Unión Europea, entre ellos Bélgica, Bulgaria, Croacia, República Checa, Estonia, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Hungría, Islandia, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Noruega, Polonia, Portugal, Rumania, Eslovaquia, Eslovenia, España y Suecia.