Empieza el dispositivo de atención a las personas temporeras durante la vendimia - Ahora
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- Desde el 12 de septiembre hasta el 11 de octubre se ha puesto en marcha en Logroño el dispositivo de apoyo a las personas temporeras durante la vendimia. Esta iniciativa, en la que participa Cruz Roja, consiste en ofrecer una mejor atención y dar apoyo a las más de 150 personas que llegan en busca de este trabajo estacional.
Una persona temporera es aquella que realiza un trabajo temporal generalmente relacionado con la cosecha o el cultivo. En este caso, la vendimia es uno de esos momentos del año en el que personas de diferentes nacionalidades (marroquíes, senegales, malienses, etc), normalmente hombres y con permiso de trabajo, llegan a Logroño en busca de empleo.
El dispositivo habilitado en el Polideportivo Municipal Titín III (Logroño) ofrece, desde el 12 de septiembre, un total de 150 camas, servicios de higiene personal, atención médica, duchas, consignas, manutención, posibilidad de cargar el móvil, así como WIFI, prestación añadida este año y que les permite tener mayor contacto con sus familiares. Además, se les brinda acompañamiento en el traslado desde la estación de autobús, poniendo una lanzadera que realiza entre 7 y 8 viajes hasta el polideportivo o albergue. En el caso de que las plazas se cubrieran en el polideportivo durante las próximas semanas, las personas que requieran este servicio serían derivadas al Centro Municipal de Acogida en Nájera que cuenta con 50 plazas más.
En el dispositivo trabaja el personal de la empresa encargada del servicio, personal del Ayuntamiento, así como personas voluntarias de Cruz Roja en Logroño. “De Cruz Roja somos 25 personas voluntarias en total que vamos haciendo turnos de siete personas por día, de lunes a domingo. Desde mi papel como voluntaria, intento conectar con las personas que llegan, preguntando cómo les ha ido en la búsqueda de trabajo, escuchando su historia, tratando de cubrir sus necesidades anímicas, además de asistirlos en el funcionamiento del dispositivo”, explica Ana Inés, voluntaria de la Organización que repite por segundo año consecutivo.
Cruz Roja afronta esta realidad social, que se repite cada año, con sensibilidad y eficacia brindando atención y generando un espacio de consulta, asesoramiento y escucha activa. El caso de Ana Inés es un ejemplo de ir un pasito más allá, de aportar ese valor diferencial propio de la Organización. “Días atrás con un grupo compartimos una conversación sobre fútbol, entonces al día siguiente se me ocurrió llevarles una pelota y se armó algo muy Iindo. Cuando llegan por la tarde, se organiza un partido entre varios y los que no juegan se divierten mirando, de ahí surge un espacio de distensión que compartimos entre todos”, cuenta.
Pasada la primera semana, el dispositivo está funcionando correctamente, “los comentarios son positivos y las personas están conformes” con el trato y los servicios. Dispositivos como este, además de dar apoyo a las personas temporeras, también deja huella en las personas voluntarias. Por lo menos, en el caso de la voluntaria Ana Inés así ha sido “Tener contacto con diferentes realidades te da otra perspectiva de las cosas y desde ahí se puede trabajar y aportar para generar cambios positivos. Es un aprendizaje constante y no se puede ser indiferente ante situaciones que requieren respuestas y compromiso”, cierra la voluntaria.
El dispositivo de personas temporeras, servicio de carácter subsidiario del Ayuntamiento de Logroño y del Gobierno de la Rioja, se estableció en la reunión de la Mesa contra la Pobreza celebrada el pasado 6 de septiembre en la que participaron también personas representantes de Cruz Roja, Cáritas, Cocina Económica, Banco de Alimentos, Universidad de La Rioja, así como portavoces de los distintos grupos municipales del Consistorio.
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