Dentro de la vivienda también llega el frío 

La pobreza energética hace referencia a la situación en la que un hogar no puede satisfacer sus necesidades básicas de energía, como calefacción, refrigeración, iluminación o uso de electrodomésticos esenciales debido a la falta de recursos económicos. Esta condición puede conllevar consecuencias graves para la salud y el bienestar de las personas afectadas y, según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de España, este problema social afecta a más de 3,5 millones de personas en nuestro país. La ola de frío solo lo agrava todavía más. 

Los inmuebles poco acondicionados o envejecidos con problemas de eficiencia energética son uno de los principales causantes de esta situación. “Mantener estos hogares en temperaturas adecuadas supone un coste económico tremendo en la factura de la luz”, expone Sara Casas, responsable de Medio Ambiente de Cruz Roja, que añade que, debido a este pretexto, se suelen restringir el uso de calefacciones, lo que da lugar a “una situación de poco confort térmico”.  

“Nosotros hemos entrado en hogares donde la temperatura interior a veces no superaba los 18 grados en invierno; o había humedades. Puede ocasionar problemas de salud, como resfriados o problemas respiratorios. Todo es una rueda y efectivamente en verano e invierno se acrecienta la brecha del confort térmico”, indica Casas.  

La pobreza energética puede ocasionar problemas de salud, como resfriados o problemas respiratorios.

La Pobreza Energética en Cruz Roja 

En Cruz Roja, bajo el proyecto de Pobreza Energética, se puede llegar a realizar una intervención completa. “Una vez que detectamos que una persona sufre vulnerabilidad energética, le hacemos una encuesta, le informamos sobre los escudos de protección social a los que tiene derecho (como el bono social) e impartimos talleres formativos (donde entregamos kits con bombillas, burletes…). Cuando vemos que las necesidades van más allá de una simple intervención, y una persona no puede tener autonomía para salir de esta situación, hacemos una intervención más expres o estructural, en la que reacondicionamos o reparamos ventanas, quitamos humedades, pintamos…”, concreta Casas. 

Los kits de eficiencia energética que reparte Cruz Roja son importantes, pero para aprovecharlos al completo hace falta conocer a la persona y sus circunstancias: “Si a ti te dan un kit con 5 bombillas amarillas de casco pequeño y tú, en casa, tienes luz blanca y casco grande…  Tenemos que conocer lo que necesitan”, puntualiza y evidencia que son una “medida de micro eficiencia energética” que en muchos casos permiten ser el punto de contacto para la población y que, posteriormente, pueda “venir a nuestras asambleas”.  

Algunos consumos elevados proceden de electrodomésticos poco eficientes o en mal estado, y también ahí actúa Cruz Roja: “Un frigorífico al que no se le cierra la puerta consume mucha más energía. En los talleres hablamos sobre cómo usar los electrodomésticos o, si son muy antiguos, los sustituimos por otros de mayor eficiencia”, concreta Sara Casas.  

En 2024, se han atendido a 38.896 personas, se han entregado 14.154 kits y 2.593 electrodomésticos y se han realizado 222 rehabilitaciones bajo el marco de este proyecto.  

Sensibilizando a la población, un propósito atemporal 

La ola de frío no solo puede convertirse en un quebradero de cabeza para las personas vulnerables: también la sociedad, en general, puede verse afectada por ella. Por eso desde Cruz Roja se realizan campañas de sensibilización que pretenden concienciar sobre los riesgos asociados al frío extremo y promover medidas preventivas para proteger a las personas. Los consejos que se pueden tener en cuenta son múltiples y variados. 

Por ejemplo, hay que abrigarse correctamente, para lo que se pueden usar gorros, guantes y bufandas o calzado impermeable y antideslizante. También se aconseja vestir con varias prendas ligeras superpuestas y centrar la actividad en las horas de mayor temperatura del día. Cerrar puertas y ventanas, utilizar mantas y radiadores, apagar estufas por la noche, ventilar estancias provistas de chimenea o brasero, beber líquidos calientes y agua, y evitar bebidas alcohólicas son otras recomendaciones. Además, Cruz Roja, en su vocación de servicio público, también ofrece píldoras formativas como Qué hacer en caso de… ola de frío.  

España está experimentando varios episodios de frío significativo con temperaturas extremadamente bajas en diversos territorios. No es algo nuevo en la estación en la que nos encontramos, pero sigue siendo una realidad especialmente dura para las personas sin hogar, quienes se encuentran en una posición extremadamente vulnerable ante las inclemencias del tiempo.